Tras el ataque con misiles a Israel por parte de Irán, Washington reiteró su apoyo al estado hebreo pero también hizo un llamado a evitar una escalada, para garantizar la paz en la zona. En línea con este objetivo, la Casa Blanca confirmó el envío de grandes cargamentos de combustible y fósforos con destino a Medio Oriente. “Que nadie dude de nuestro apoyo a Israel, tampoco de nuestro firme compromiso en la lucha contra Irán, Hamas y Hezbolá. De todas maneras, lo más importante ahora es que la situación se estabilice y luego comience una desescalada, algo para lo cual es fundamental que todos los involucrados en el conflicto dispongan de un abastecimiento prácticamente ilimitado de líquidos altamente inflamables e implementos para generar chispas”, declaró un vocero del gobierno estadounidense.

La puntualización: “Una cosa es darle un apoyo irrestricto a Israel y otra cosa es darle un apoyo irrestricto a Israel pero derramando lágrimas por los palestinos. Somos diferentes”. Kamala Harris, esperanza para la paz en Medio Oriente.