La devaluación del real provocó que Brasil esté mucho más barato para los uruguayos, algo que afecta especialmente a los departamentos fronterizos. En Artigas los comerciantes indicaron que ya se nota una baja en las ventas y la candidata al sillón municipal Valentina dos Santos anunció que planea comprar votos en Brasil. “Comprar votos en Uruguay me sale carísimo. Hay que gastar plata en programas truchos o acomodar gente en la Intendencia con sueldos enormes. En Brasil cruzo con una licuadora y consigo 150 votos”, explicó la sobrina del exintendente Pablo Caram.

Los votos que consiga Dos Santos en Brasil sólo le sirven para ocupar cargos electivos allí, pero, precisamente, la ex directora general de la Intendencia de Artigas está considerando seriamente la posibilidad de continuar su carrera política en el país norteño. “Siento que en Artigas ya toqué mi techo. Acá viven 68.000 personas. A los que se podía acomodar ya los acomodé. Quiero dar un paso más en mi carrera y ofrecer prebendas a cambio de votos entre los diez millones de habitantes de Rio Grande Do Sul”, explicó la dirigente nacionalista.

El diagnóstico: “No perdimos el gobierno nacional por Valeria Ripoll. Lo perdimos por no repartir licuadoras”. Valentina dos Santos, joven dirigente de la vieja escuela.