Un grupo de militares liderados por el general Juan José Zúñiga ingresó ayer en la sede del Poder Ejecutivo boliviano y reclamó cambios en el gabinete. La situación tomó por sorpresa al sistema político uruguayo y las repercusiones aún se están procesando. El dos veces expresidente Julio María Sanguinetti reconoció que aún está evaluando qué acusación lanzará contra el presidente boliviano, Luis Arce, para justificar el alzamiento militar. “En este tipo de situaciones nunca se puede trazar una línea divisoria clara entre quienes actúan bien y quienes actúan mal. Obviamente que este golpe de Estado es condenable, pero no menos condenables son las acciones del presidente Arce, sobre las que en este momento no tengo demasiada información, pero la estoy recolectando para escribir mi columna del Correo de los Viernes”, declaró el líder colorado.

La aclaración: “Nosotros no estamos detrás de esto. Simplemente nos alegramos”. Analista de la CIA.