El intendente de Artigas, Pablo Caram, fue condenado por la Justicia a 14 meses de prisión por el caso del pago irregular de horas extras en la intendencia, pero al no tener antecedentes penales la pena fue sustituida por libertad a prueba y dos horas de trabajo comunitario durante dos meses. Si bien el jerarca aún no comenzó a cumplir esta última parte de la condena, ya les consiguió 300 horas de trabajo comunitario a sus familiares. Una fuente del Poder Judicial consideró que la condena a Caram “fue el fallo más positivo para la comunidad desde que yo tengo memoria. La condena a trabajo comunitario suele ser más que nada un castigo para el delincuente, pero en este caso, al tratarse de Pablo Caram, las horas de trabajo se multiplicaron por diez. Durante los próximos cuatro meses vamos a tener a toda su familia realizando tareas en bien de la comunidad”.

La aclaración: “Lo mío es un caso aislado”. Intendente nacionalista que no comete delitos.