La competencia de triatlón fue suspendida el lunes debido a la mala calidad de las aguas del Sena y se pospuso para hoy, aunque no es seguro que se haga, ya que esto depende de los análisis que se realicen. De todas maneras, los organizadores destacaron que el ánimo entre los atletas es “muy alto”. “El triatlón es una disciplina tremendamente dura y los competidores están preparados física y mentalmente para exigir al máximo su resistencia a los grandes esfuerzos y a los coliformes fecales”, explicó un vocero del comité organizador.
Varios deportistas reconocieron que desde hace varios meses vienen trabajando la resistencia a los microorganismos patógenos presentes en las aguas residuales que terminan en el célebre río parisino. “En mi caso me preparé más para eso que para la parte de resistencia al trabajo muscular, porque de nada me serviría ganar una medalla olímpica si termino muriendo”, explicó un atleta.
El compromiso: “Más allá de episodios puntuales, el agua del Sena es mayormente pura”. Alcaldesa de París, desde el hospital en el que terminó tras bañarse en el río.