El anuncio de la vuelta de Oasis generó entusiasmo entre los fanáticos y la prensa especializada, aunque también un poco de curiosidad, ya que hasta ahora no había trascendido el motivo por el que se concretó el regreso. Pero ayer, Peggy Gallagher, la madre de los hermanos Liam y Noel, explicó que la banda en realidad no se había separado, sino que sus dos hijos estaban en penitencia y no podían tocar. “La verdad es que me harté de sus peleas. Son mis hijos y los quiero, pero a veces pueden ser insoportables. Les dije una vez que si seguían peleándose los iba a poner 15 años en penitencia. Se los dije una segunda vez. A la tercera tuve que cumplir”, relató la mujer.
Si bien la señora Gallagher está contenta con la vuelta de Oasis, ya les advirtió a sus hijos que si volvían a pelearse los pondría otros 15 años en penitencia.
La queja: “A veces siento que debería haberme conformado con tener un par de gatos”. Peggy Gallagher, madre sacrificada.