“Yo me crie en una familia conservadora, de derecha, muy tradicional, y por eso arranqué para ese lado. Pero con el tiempo me fui dando cuenta de que todas esas cosas horribles que se decían en mi casa sobre la izquierda no eran tan así. Fui abriendo la cabeza a otras sensibilidades, fui evolucionando hacia el progresismo y esta es la culminación de ese camino”. Con estas palabras explicó Laura Raffo los motivos que la llevaron a integrarse a Alianza País, el ala del Partido Nacional que agrupa a los sectores que antes se encolumnaban tras la figura de Jorge Larrañaga. La exprecandidata a la vicepresidencia reconoció que alejarse del herrerismo “fue difícil”, aunque consideró que “es momento de cerrar esa etapa y abrir esta etapa nueva, una etapa para soñar con el progresismo, con la justicia social, con la socialdemocracia y, quién te dice, a lo mejor un poquito más allá”.

Una cosa no quita la otra: “Yo no tengo rencores hacia el herrerismo, pero eso no quiere decir que, desde Alianza País, no vaya a intentar construir hegemonía dentro del Partido Nacional para modificar la correlación de fuerzas entre las pulsiones conservadoras y las pulsiones transformadoras”. Laura Raffo, teórica marxista.