Ya son dos los ministros del gobierno argentino que renunciaron: Gerardo Werthein, excanciller, y Mariano Cúneo Libarola, exministro de Justicia. Fuentes de la Casa Rosada reconocieron que esta situación es vista en el entorno de Javier Milei como “extremadamente preocupante”. “No es que la renuncia de ministros genere inestabilidad o falta de confianza. El problema es que acerca al presidente a un sueño que tiene desde que asumió: nombrar a uno de sus perros como ministro”. Las fuentes advirtieron además que “si se llegara a concretar un nombramiento de estas características, existe el riesgo de que ni siquiera sea un perro vivo, sino que se trate de Conan, el animal que se comunica con él desde la tumba”.

Aunque en la Casa Rosada son conscientes de que las decisiones de un perro “difícilmente sean más bestiales que las que toma Milei”, la presencia de un can en el gabinete podría generar ciertos recelos por parte de Estados Unidos. “Si el presidente va a nombrar un perro, que sea después de que Trump nos dé todo el dinero que nos prometió”.

El reemplazo: “Ustedes elijan el nombre. Solamente pido que sepa tocar la batería, porque no me gusta cómo está sonando mi banda”. Pedido de Javier Milei a sus asesores.