El ministro de Defensa Nacional de la administración pasada cuestionó con dureza la decisión del gobierno de rescindir el contrato con Cardama para la construcción de las patrulleras oceánicas. Según García, la cuestión de la garantía es “lateral”. “Es un tema al que no le di demasiada importancia porque confío en el señor Mario Cardama. ¿Y por qué confío en él? Porque le pregunté si la empresa que presentó como garantía era una empresa seria y me dijo que sí mirándome a los ojos. O sea que estaba todo en orden”.

El líder de la lista 40 también aseguró que tras un par de encuentros con el propietario del astillero español “llegamos a forjar una relación de amistad, y ¿qué clase de persona sería si no fuera capaz de creerle a un amigo cuando me dice algo?”.

García aclaró de todas maneras que “la posibilidad de que hayan traicionado mi confianza siempre está”, y si eso ocurre, “voy a salir por los medios a dar lástima y a aclarar que soy el primer sorprendido. Los blancos hacemos las cosas así”.

El orgullo: “Perdimos las elecciones hace casi un año y aún así seguimos marcando agenda. Es como si aún estuviéramos en el gobierno”. Nacionalista feliz.