El jueves, José Jerí se transformó en el nuevo presidente de Perú, tras la destitución de Dina Boluarte por “notoria incapacidad moral”. Tras ser investido, el novel mandatario recibió desde su país y el resto del mundo innumerables saludos en los que le deseaban suerte y le recomendaban no trasladar demasiadas cosas a la oficina presidencial. “Por suerte, tengo grandes amigos en esto de la política, que me dan sabios consejos. Uno de los consejos que más recibí fue que no cayera en la tentación de llevar muchas cosas de mi propiedad a mi nuevo despacho. Me recomendaron que en lugar de eso intentara manejarme con los objetos que ya hay ahí. Así que solamente voy a llevar una foto de mi familia, una computadora personal y un destructor de documentos”, declaró Jerí.

Un experto en política de Perú consideró que en ese país “para ser presidente se necesita algo mucho más importante que la capacidad de gobernar: la habilidad para huir lo más rápido posible, por lo que es fundamental andar siempre ligero de equipaje”.

El apoyo: “Toda mi solidaridad para la presidenta Dina Boluarte, que fue víctima de los prejuiciosos para quienes un presidente debe tener una supuesta ‘capacidad moral’”. Javier Milei, presidente capaz de cualquier cosa.