La Justicia imputó ayer a Jairo Larrarte, socio fundador de la empresa de bonos ganaderos Grupo Larrate. Esto fue celebrado por los inversionistas estafados, aunque el problema que más les preocupa es el destino de las 80.000 cabezas de ganado que no aparecen. El síndico encargado de administrar la empresa quebrada explicó que “hace un año la empresa decía tener 100.000 cabezas de ganado, pero ahora cuenta solamente con 19.000. Eso quiere decir que hay 80.000 reses que están en paradero desconocido. De todas maneras, tengo el convencimiento de que las vamos a encontrar. Va a llevar tiempo, pero las vamos a encontrar, porque no tienen lugar donde esconderse.

Los investigadores consideran “muy poco probable” que los bovinos se estén ocultando en alguna llanura, ya que ahí serían visibles. Las sierras también están descartadas, debido a las escasas capacidades físicas para esconderse en ese tipo de terrenos. La hipótesis que se maneja con más fuerza es que se hayan ocultado en bosques de eucaliptus. “Quizás ahí sea un poco más difícil ubicarlas, porque se pueden ocultar detrás de los árboles, pero no se van a poder esconder indefinidamente”, enfatizó el síndico.

El análisis: “Si yo supiera que voy a terminar en un frigorífico, también desaparecería”. Experto en comportamiento animal y finanzas.