El volcán siciliano, el más alto y activo de Europa, lanzó ayer una nube de humo de cinco kilómetros de alto, algo que puso en alerta a las autoridades y a los habitantes de Sicilia. Según informó la prensa local, los habitantes de zonas cercanas al Etna están evitando colocarse en poses ridículas o comprometedoras, por miedo a que el volcán entre en erupción. “No quiero que me pase lo mismo que a los habitantes de Pompeya. Si quedo inmortalizado en lava volcánica no me gustaría que los humanos del futuro me vean haciendo payasadas frente a un espejo”, declaró una mujer que vive a escasos dos kilómetros del volcán.
Otro vecino de la zona reconoció que él y su esposa se abstienen de practicar sexo cuando el Etna empieza a lanzar cenizas. “No soy un actor porno. No quiero que la gente me vea teniendo sexo, ni en video ni en esculturas de yeso hechas en moldes de lava volcánica. Cuando me parece que puede haber una erupción, me pongo a mirar la televisión”.
Un bromista: “Si hay riesgo de erupción me pongo un disfraz de extraterrestre. A ver qué cara ponen los investigadores del futuro”. Chistoso siciliano.