La posibilidad de que el gobierno del país norteño construya una planta de generación de energía eólica en una zona disputada entre Uruguay y Brasil puso en alerta a la cancillería, que pidió explicaciones a Brasilia. En el gobierno uruguayo temen que el parque eólico ubicado en Rincón de Artigas “se lleve todo el viento que nos corresponde a nosotros”. Fuentes de cancillería explicaron que hay solamente dos escenarios en los que Uruguay podría aceptar la instalación de los molinos de viento. “Una posibilidad es que nos den parte de la electricidad que se genera. La otra es que nos devuelvan el viento que usan. Pero no podemos regalarles todo ese viento a cambio de nada. Nuestros recursos naturales y, sobre todo, nuestras fuentes de energías renovables son un activo muy importante de nuestro país. También podríamos construir un parque eólico de UTE, pero creemos que sería bastante más fácil llevar el caso a La Haya y exigir que nos den parte de la energía o nos devuelvan el viento. Seguramente terminemos acordando lo primero”.

La queja: “Este gobierno cobarde y pusilánime se resiste a enviar militares para recuperar el Rincón de Artigas por la fuerza”. Opositor inquieto.