Mientras se estudia la posibilidad de derogar en el Parlamento una resolución municipal que habilita la destrucción total de algunos inmuebles con valor histórico, ediles oficialistas trabajan en un nuevo decreto, que en este caso permitiría la demolición de cualquier inmueble ubicado sobre la avenida 18 de Julio cuya fachada lleve cuatro décadas sin ver la luz del sol debido a la presencia de algún cartel. “Hay que ser realistas. ¿De qué sirve un inmueble con valor arquitectónico si nadie lo puede ver? Sacar esos carteles de tres metros de altura que pone cualquier comercio es imposible, como ya se demostró. O sea, si Mariano Arana, que estuvo dos mandatos y le interesaba de verdad el paisajismo, no logró hacerlo, ¿lo va a lograr alguno de los aspirantes a presidente que suelen ocupar la intendencia? Mejor tirar abajo esas casas y construir ahí un buen edificio de 12 pisos, que a lo mejor no es tan lindo pero por lo menos se va a ver por encima de la cartelería”, expresó un curul del Frente Amplio.
La advertencia: “Si me sacan el cartel de McDonald’s de 18 y Río Negro que vi durante toda mi vida, me pongo a juntar firmas”. Veinteañero defensor del patrimonio.