La decisión del recientemente electo presidente del Honorable Directorio del Partido Nacional, Álvaro Delgado, de no renunciar a la Cámara de Senadores y reservarse el derecho de ocupar su banca en algunas sesiones generó cuestionamientos hasta desde sus propias filas, como en el caso de Martín Lema. Frente a las críticas, Delgado aclaró que va a dedicarse “en un cien por ciento” a la presidencia del partido. “Ese cargo no va a ser un hobby para mí ni nada por el estilo. El hobby va a ser el Senado”, explicó Delgado.
El excandidato a la presidencia opinó que “cualquier trabajo que uno tenga, por más que lo entusiasme y por más absorbente que sea, requiere cada tanto un respiro para recuperar fuerzas”. Delgado consideró que para eso no hay “nada mejor que tener un desagote al que uno le pueda dedicar algunas horas cada tanto. En mi caso, el hobby que más me gusta es ser senador, especialmente ahora que el Partido Nacional no tiene mayoría en ninguna de las dos cámaras y la cosa pinta para que todo el mundo menos nosotros pacte con el gobierno. Los blancos realmente no vamos a tener mucho trabajo de verdad ahí”.
La queja: “No sé por qué dicen que soy un político que no enamora. Todo el mundo me ama, tanto fuera como dentro de mi partido”. Álvaro Delgado, candidato asesorado por su espejo.