“Hoy por hoy, la situación está completamente estancada. De todos modos, estamos convencidos de que las amplias coincidencias que tenemos, y que nos han llevado a formar un espacio nuevo, van a posibilitar llegar a un acuerdo”. Así definió un legislador oficialista el estado de las negociaciones para elegir el nombre de la agrupación que incluirá al Frente Amplio y a los sectores liderados por Guido Manini Ríos y por Pedro Bordaberry. “El problema es que es difícil convencer a todos. El nombre ‘Frente Grande’, por ejemplo, no le gusta a Bordaberry; el nombre ‘Partido Civil Republicano’ no convence a Manini Ríos; y el nombre ‘Movimiento 27 de junio de 1973’ no gusta en el Frente”, explicó el legislador.

En la izquierda consideran que no se debería apurar una definición. “El nombre es algo importante. El resto, es decir, pensar en una propuesta programática, no te lleva tanto tiempo, porque básicamente es armar una lista de las cosas que a uno le gustaría hacer pero no hace por falta de plata”.

Marcando presencia: “Si no fuera por los enfrentamientos y polémicas internas, parecería que los blancos no existimos”. Dirigente nacionalista que está enojado con otros dirigentes nacionalistas.