El primer año de la presente legislatura está siendo más intenso que lo habitual en otros períodos, con dos interpelaciones, varios llamados a sala y un debate por el presupuesto que, por primera vez desde la recuperación democrática, no tiene un oficialismo con mayorías propias. Varios legisladores reconocieron que están fatigados y ansiosos por irse de vacaciones. “Después de Navidad largo todo y me voy, porque estoy fusilado. Todavía no sé a dónde, porque tengo muchas opciones. Concretamente, puedo ir a la casa de veraneo de cualquier senador o diputado del Frente Amplio, y en todas me van a dar el mejor dormitorio y a atenderme como un huésped de lujo, así que me va a llevar un tiempo elegir”.
Perrone aclaró, de todas maneras, que, a pesar de todo el trabajo que implica ser uno de los dos únicos diputados de Cabildo Abierto, tiene personas que lo ayudan en su día a día. “Cualquier favor que precise, ya sea que me lleven a hacer algún trámite, me preparen la cena o me limpien el jardín, yo sé que es solamente agarrar el teléfono y llamar a un legislador frenteamplista y a los cinco minutos lo tengo en la puerta de casa. Es genial. Es como un Uber de los favores”.
La frase: “Hay que sacarles el mayor provecho posible a las bancas de Cabildo Abierto, exprimirlas como si fueran las últimas que vamos a tener en nuestra historia, porque seguramente va a ser así”. Guido Manini Ríos, político y general que está a punto de retirarse por segunda vez.