La confirmación de que el gobierno construirá la presa en Casupá hizo que aumentara la preocupación por los impactos ambientales de la obra. Las autoridades ya anunciaron a vecinos del lugar, académicos y defensores del medioambiente que se realizará una serie de informes sobre cuáles serán las afectaciones al ecosistema del lugar. Un jerarca del gobierno explicó que “la idea es tener la mayor cantidad de información posible para determinar qué tan culpables nos vamos a sentir por construir una obra que, a esta altura y después de todo lo que pasó, obviamente no vamos a suspender”.

El jerarca enfatizó que los informes de impacto ambiental “serán completamente rigurosos y se realizarán por parte de instituciones serias e independientes, porque la realpolitik no puede ser una excusa para no sentir culpa”.

La estrategia: “Nuestro compromiso con el medioambiente nos obliga a contaminar siempre un poquito menos que blancos y colorados”. Político y ecologista que es más político que ecologista.