El director del Instituto de Derecho Penal y Criminología de la Facultad de Derecho de la Universidad de la República, Germán Aller, aseguró que contrariamente a lo sostenido por las autoridades, la pandemia ha influido en las cifras de los homicidios, y que ese “envión favorable” habría que “aprovecharlo”.
“Se sostuvo, y no creo que haya sido un acto de mala fe, que la pandemia no había sido un elemento decisivo para bajar esa criminalidad, sino un distinto accionar de la Policía, que en parte también lo hubo, pero efectivamente queda bastante claro que la pandemia ha incidido y que ese envión favorable lo ideal es aprovecharlo”, dijo Aller, en una entrevista con Radio Universal.
Según Aller, la “tendencia” de los homicidios “no ha cambiado”, y eso se confirma con las estadísticas que divulga el Ministerio del Interior. “Uruguay sigue en esa progresión de aumento, también en la forma de actuación de los homicidios, más cruel, más innecesaria, para llegar incluso al propósito de quitar la vida. Ese es un problema que en Uruguay debe preocupar, hace mucho que estamos con ese incremento y que no ha cesado”, dijo Aller, que resaltó que “preocupa la cantidad de homicidios en estos últimos tiempos”.
Aller además aseguró que hay un incremento de los sicariatos en Uruguay y sostuvo que es necesario trabajar sobre las causas que generan los delitos, algo que se han hecho en los sucesivos gobiernos pero de forma “insuficiente”.
El especialista consideró que los aumentos de penas no tienen un resultado concreto en la criminalidad porque “la pena no es disuasoria del delito”. “Puede tener una relativa incidencia, pero no hay un correlativo que a más pena haya menos delito. Es errónea y es equivocada esa visión, y si bien entiendo que está en el común de la gente, no por eso va a ser cierta. El delincuente en general no delinque mirando el Código Penal”, expresó.
El especialista sostuvo que la gestión del actual ministro del Interior, Jorge Larrañaga, y la del ex titular de la cartera Eduardo Bonomi “se parecen más de lo que ellos piensan”, y sus diferencias “son más ideológicas que de actuación”. Si bien consideró que existe “en ciertos aspectos y ámbitos” un patrullaje “mayor”, “cuando llevamos más patrullaje a una zona, hay otra que va a tener menos”.
Finalmente, Aller se mostró partidario de incorporar más mujeres a la Policía, porque “funcionan muy bien” en dicha institución, y porque el país “necesita mucho más” policías a caballo y a pie.