La jueza penal de 1° turno de San Carlos, Andrea Camaño, ratificó el acuerdo de proceso abreviado alcanzado entre la defensa del excoordinador de Jefatura de Policía de Maldonado Fernando Pereira y el fiscal de San Carlos de 2° turno, Jorge Vaz, por el que se dispuso una condena de 24 meses de prisión.

El policía reconoció y fue condenado por reiterados delitos de abuso de funciones, faena clandestina, revelación de secretos, omisión de funcionario público de denunciar delitos, tráfico interno de armas y falsificación ideológica por un particular.

Las partes acordaron que el cumplimiento de la pena sea con nueve meses de prisión efectiva, descontando el tiempo que ya estuvo en prisión, tres meses de prisión domiciliaria y 12 meses en régimen de libertad a prueba.

En ese tiempo, el ahora condenado deberá fijar domicilio y tiene prohibido salir del país. Además, deberá pagar una multa de 100 unidades reajustables, unos 132.000 pesos, y fue inhabilitado para ejercer cargos públicos durante tres años, lo que implica que sea dado de baja, según informaron a la diaria fuentes judiciales.

Pereira fue detenido e imputado el 16 de junio de este año por los delitos de revelación de información reservada, abuso de funciones, omisión contumacial de los deberes del cargo, omisión de funcionario público al denunciar delitos y faena clandestina.

El juez letrado de 2° turno Vital Rodríguez dispuso la formalización del proceso con prisión domiciliaria por 90 días, pero el fiscal apeló la decisión y el Tribunal en lo Penal de 4° turno le concedió la razón a la Fiscalía. Ante eso, unas dos semanas después de la imputación, Pereira debió ir a prisión efectiva, por lo que aún le quedan cinco meses de prisión efectiva para cumplir la pena acordada.

La investigación penal reveló el vínculo entre el excoordinador de la Jefatura de Maldonado y el entonces ministro de Turismo, Germán Cardoso, tras conocerse al menos nueve llamadas en las que Cardoso le pidió favores al policía. La interceptación de las llamadas recibidas por Pereira develó que Cardoso llamó a Pereira cuando le rompieron un vidrio de su auto, en una oportunidad en que intentaron estafar a su madre y una vez que el ministro quiso tener información sobre si le habían realizado la prueba de espirometría a una amiga de su esposa, que había protagonizado un accidente.

“Entendemos que Pereira abusó de su cargo para pedir información para un tercero, sin la finalidad de interés público, amén de que el contexto de la llamada da a entender que se trataba de evitar que le hicieran pruebas de espirometría”, expresó el fiscal Vaz, tras la audiencia de formalización.