La jueza penal de 27º turno, Silvia Urioste, realizará este jueves un careo entre el médico Ramón Rodríguez de Armas y el oficial de la Fuerza Aérea (FAU) Bernabé Saralegui, quien declaró haberlo visto en el centro de torturas clandestino 300 Carlos, que funcionó entre 1975 y 1977 en un galpón ubicado en el predio del Batallón de Infantería Blindado Nº 13.
El careo se realiza en la causa que fue abierta a partir del testimonio de Alicia Cadenas y Elba Rama, detenidas en julio de 1976 en Buenos Aires y fue dispuesto por la jueza Urioste luego de que Rodríguez de Armas negara cualquier vinculación con centros de tortura de la dictadura y asegurara haber trabajado en el Hospital Militar entre 1971 y 1996.
El médico militar, conocido como Óscar 5 por su pertenencia al OCOA, también fue reconocido por varias víctimas del 300 Carlos y de otros centros de tortura, como la casona de Punta Gorda o la casona de Bulevar y Palmar, en el subsuelo de la sede del Servicio de Información y Defensa.
En ese centro, las víctimas del terrorismo de Estado Elba Rama, Sara Méndez y Alicia Cadenas reconocieron a Rodríguez de Armas como el médico que iba a ver a María Claudia García cuando estaba por dar a luz, y habría sido quien ordenó su traslado al Hospital Militar.
Varias de las víctimas señalaron que su rol era controlar la capacidad de resistencia a la tortura y algunos le vieron la cara en el patio de la sede del SID, en octubre de 1976, cuando varias víctimas del primer vuelo fueron presentadas ante la opinión pública como detenidos en un supuesto operativo en el chalet Susy de Shangrilá, que fue montado para ocultar la existencia del vuelo clandestino. Rodríguez de Armas se encargó de que las víctimas aparentaran estar en mejores condiciones, debido a que iban a ser mostradas como recién detenidas.
También fue visto por los militantes Edelweiss Zahn y Sergio López Burgos en el centro de torturas de Automotores Orletti, que funcionó entre mayo y noviembre de 1976 en Buenos Aires.
En la causa que investiga torturas en el 300 Carlos, Bernabé Saralegui dijo haber visto a otros militares, como José Gavazzo y Jorge Silveira, lo que provocó que sus defensas reclamaran otras instancias de careo en esa causa.
Saralegui era el enlace de la Fuerza Aérea con el OCOA, y en sus declaraciones ante Urioste dijo que el 300 Carlos “era el cerebro de la OCOA” y recordó a Gavazzo en el centro de torturas: “Me lo presentaron una vez cuando fuimos a saludar al general Vadora en su visita al 300 Carlos y nos ordenaron que fuéramos a saludarlos, estábamos en una formación de saludos y luego Gavazzo apareció y cuando está ahí conversando con el general trajeron un detenido y venía con los ojos vendados y lo empezó a interrogar tomándolo del brazo y en determinado momento Gavazzo lo zarandeó un poco [...] Victorino Vázquez me dijo ‘empieza el show de Gavazzo’”.
Interrogado sobre la tortura, Saralegui declaró: “Para hacer trabajo de campo había que tener información de los detenidos, y a ellos se les hacía apremios físicos”.
A fines de diciembre de 2020, el fiscal especializado en Crímenes de Lesa Humanidad, Ricardo Perciballe pidió el procesamiento con prisión de Rodríguez de Armas por abuso de autoridad.