El director de Información e Inteligencia Policial, Claudio Correa, declaró este jueves ante la fiscal de Flagrancia de 12° turno, Gabriela Fossati, en la causa que investiga al exjefe de seguridad del presidente Luis Lacalle Pou, imputado por asociación para delinquir, tráfico de influencias y suposición de estado civil.

Correa, que en un principio iba a ser convocado como testigo en la causa, fue citado por Fossati para declarar en Fiscalía en calidad de indagado, por lo que fue acompañado por su abogado, Carlos Bustamante.

El director de Inteligencia fue el responsable de la detención de Alejandro Astesiano en la residencia de Suárez, luego de que el presidente llegara con sus hijos y su custodia de unas vacaciones en Costa Rica, el 25 de setiembre.

Astesiano le dijo al presidente que Correa lo estaba esperando en la residencia de Suárez y, cuando llegaron, el director de Inteligencia le informó sobre el pedido de detención contra Astesiano. Uno de los cuestionamientos que se realizó sobre el operativo es por qué el exjefe de seguridad presidencial no fue detenido al llegar al Aeropuerto de Carrasco.

Uno de los puntos que investiga la fiscal es cómo fueron borrados buena parte de los archivos esenciales para la investigación, incautados en el celular de Astesiano, algo que demoró el avance de la investigación penal porque los archivos debieron ser recuperados por la Policía Científica. En un principio, la Fiscalía atribuyó a Astesiano el haberlos borrado, algo que fue considerado para la imposición de la prisión preventiva, pero ahora, según informó este jueves el semanario Búsqueda, maneja la posibilidad de que los archivos hayan sido borrados cuando se eliminaron, a pedido de Presidencia, las comunicaciones con el presidente Lacalle.

El miércoles declararon en calidad de indagados ante la fiscal Fossati otros dos jerarcas policiales por la información que surgió de los chats del teléfono de Astesiano: el subdirector de la Policía Nacional, Héctor Ferreira, con quien Astesiano intercambió varios mensajes para utilizar recursos del Estado a beneficio propio, y el director de la Dirección de Fiscalización de Empresas del Ministerio del Interior, Henry de León, a quien Astesiano le pidió indultar a una empresa privada de seguridad, vinculada a Astesiano, por una sanción económica por incumplimiento.