El exsindicalista y empresario argentino Marcelo Balcedo y su esposa Paola Fiege esperan la convocatoria de la Comisión de Refugiados (CORE), responsable de evaluar la solicitud de refugio realizada por los argentinos a principios de febrero, quienes aseguran ser víctimas de persecución política en su país y esperan que la Justicia uruguaya deje sin efecto su extradición a Argentina, asunto que ya cuenta con sentencia firme en Uruguay.

La decisión sobre el refugio será tomada por la jueza de Crimen Organizado de 2° turno, María Helena Mainard, a partir del insumo del informe de la CORE, que tiene 90 días para resolver, desde la solicitud. La decisión de Mainard, que puede ser apelada en segunda y tercera instancia, será determinante para el proceso de extradición.

El abogado de Balcedo, Marcelo Domínguez, explicó a la diaria que, en el caso de que la Justicia otorgue la calidad de refugiados a Balcedo y Fiege, la extradición cae “automáticamente”.

Domínguez dijo que la solicitud de refugio se tramitó ante elementos que “pueden indicar persecución política”, por la actividad sindical de Balcedo como presidente del Sindicato de Obreros y Empleados de Minoridad y Educación (Soeme), por parte del gobierno provincial de María Eugenia Vidal, y señaló la causa conocida como la “Gestapo Antisindical”, por la que varias organizaciones sindicales denunciaron a empresarios y agentes de inteligencia vinculados a Vidal por “armar causas” contra sindicalistas.

Además, señaló que la línea editorial de las radios y el diario que pertenece a Balcedo es opositora al macrismo, por lo que podría construir un elemento más dentro de la hipótesis de persecución política.

Para Domínguez, existe “cierta animosidad” por parte del juez federal de La Plata de 3º turno, Ernesto Kreplak, quien insiste en continuar con investigaciones en Argentina que para el abogado constituiría una violación al principio de que una persona no puede ser juzgada dos veces por los mismos hechos (Non bis in idem).

Kreplak, que investiga en Argentina a Balcedo y Fiege por asociación ilícita y lavado de activos, se ha quejado de la falta de colaboración por parte de la Justicia uruguaya y ha advertido que la causa por la que fueron condenados no es una investigación independiente, sino que se trata de la misma investigación iniciada en Argentina, por lo que reclamó la administración de los bienes decomisados por la Justicia uruguaya.

“Necesitamos un juez imparcial que realmente imparta justicia, porque están todas las pruebas de que esto está todo armado”, dijo Fiege a principios de febrero en declaraciones realizadas a FM Gente. “No es que no queremos ir a Argentina, sino que con toda la situación que se generó con nosotros es una causa que no fuimos los únicos tampoco, y a nosotros nos armaron en Argentina, y luego lastimosamente acá [en Uruguay] se hicieron eco de eso”, agregó.

Balcedo y Fiege cumplen condena por lavado de activos, contrabando y tráfico de armas, luego de un acuerdo abreviado alcanzado con la Fiscalía, en octubre de 2020, que implicó el decomiso de cuatro millones de dólares, un Porsche Panamera, un Porsche Boxter S, un Chevrolet Camaro, una camioneta Rover Range y un chalet en Playa Verde.

El acuerdo implicó la destrucción de dos pistolas Glock calibre 40, una carabina colt calibre 22 y un revólver Ruger calibre 38, y se dispuso la devolución a la pareja de 2.635.335 dólares que le habían incautado cuando fue detenida en enero de 2018.

La extradición a Argentina de Balcedo y Fiege fue otorgada por la Justicia uruguaya en marzo de 2018, pero su concreción quedó supeditada al cumplimiento del proceso en Uruguay. En ese momento, cumplían prisión preventiva a pedido del fiscal Rodrigo Morosolli, imputados por lavado de activos, tráfico de armas, contrabando y apropiación indebida.

En noviembre de 2022, el nombre de Balcedo volvió a la agenda pública luego de que se conociera una conversación entre el exjefe de seguridad presidencial Alejandro Astesiano y una persona supuestamente enviada por el empresario argentino que quería concretar una reunión con el presidente, Luis Lacalle Pou, vinculada al juicio que Balcedo inició al Estado uruguayo por 22 millones de dólares.

“Dale, movete que hay mucha guita”, le dijo a Astesiano en agosto de 2022. Cuando el exjefe de seguridad fue dejando de contestarle, el hombre insistió: “Mirá que Fiscalía contestó la semana pasada y en cualquier momento empiezan a negociar el juicio. Tratá de meter la cabeza y NO quedar afuera!! Tas avisado. (Yo no te comenté nada, es todo muy reservado)”.