La jueza en lo penal de 36º turno, Marcela Vargas, resolvió mantener la reserva de la identidad de las víctimas que denunciaron al senador del Partido Nacional Gustavo Penadés por haberlas explotado sexualmente cuando eran adolescentes.
Las defensas de los indagados resolvieron apelar la decisión, por lo que la reserva pasará a resolverse en un Tribunal de Apelaciones. Aunque la jueza definió que la apelación no tenga efectos suspensivos, por lo que podría tomarse las declaraciones necesarias como prueba anticipada, la fiscal resolvió esperar a que el Tribunal de Apelaciones defina la situación.
Tras la audiencia, Penadés brindó declaraciones en una rueda de prensa. “Vuelvo a reiterar mi absoluta inocencia”, afirmó, y subrayó: “Absolutamente sigo insistiendo en que soy inocente, que tengo la conciencia tranquila y que esperemos que en la Justicia se pueda demostrar esto”.
Sobre las garantías, señaló que “por ahora no faltan garantías”, pero “lo que sí la jueza reconoció es que con la decisión que se adoptó, que fue que la cámara Gesell, donde no se le mire, esté apagada la cámara y la voz se distorsione, se vulneran derechos de mi defensa”, indicó Penadés.
“Hoy no pasó nada grave, lo que se desestimó fue un recurso que se planteó para que en el momento en que los denunciantes testimoniaran se pudiese hacer como se quiere por parte de la Fiscalía, que es con una cámara en otro local, pero no en la forma en la que se está pretendiendo hacer, que es con la imagen apagada y la voz distorsionada”, explicó el nacionalista.
Consultado sobre por qué planteaba esto, respondió: “Porque imagínese que yo al día de hoy no conozco a ninguno de los que me han denunciado y en el expediente no figura ningún tipo de comprobación de que existiera algún tipo de peligro para las víctimas eventualmente”. Sobre si podría perjudicar la investigación el hecho de que conozca a las víctimas, dijo que “por supuesto” y delegó la argumentación a su abogado, Javier Vega.
Penadés aseguró que “lo que se está haciendo es vulnerar el derecho de la defensa, pero yo confío en la Justicia, confío en la jueza y entiendo que el tiempo va a ir dando la posibilidad de conocer la trama que hay detrás de todo esto”.
Respecto de por qué entiende que debe conocer las identidades de las víctimas, respondió: “¿Y a usted qué le parece, si usted fuera enjuiciada por alguien, ¿no le parece que usted tendría que saber quién es el que la enjuicia?”.
Ante la pregunta sobre de qué trama habla, indicó: “Tenemos que verla, hay que verla. En su momento lo haremos. Vamos a ir en parte haciéndola”. Sobre si se refiere a una “trama política”, planteó: “No, no, veremos con el tiempo”, y dijo no saber si se trata de una maniobra política. “El tiempo lo dirá. Lo que sí les puedo decir a todos ustedes es que yo estoy tan tranquilo como el primer día y sigo insistiendo con mi inocencia”, subrayó.
Respecto del riesgo que supone para las víctimas, Penadés señaló que “la Fiscalía habla de riesgos, pero no demuestra ni dice cuáles son esos riesgos”. “Y, además, en el expediente no figura ningún riesgo hacia esas víctimas, así que es muy difícil”, remarcó.
En el documento en el que la fiscal Alicia Ghione pidió el desafuero de Gustavo Penadés se hizo énfasis en que la reserva de la identidad de las víctimas era clave por los riesgos que podían correr, argumentos que fueron compartidos por la defensa de seis de los nueve denunciantes, que están representados por el Consultorio Jurídico de la Facultad de Derecho de la Universidad de la República.
El caso involucra a nueve víctimas hasta el momento. Además, hay otras dos personas que manifiestan haber sido víctimas pero van a declarar en calidad de testigos. Uno de ellos porque vive fuera del país y el otro porque su causa prescribió.
Consultado sobre por qué cree que hay 11 personas que lo denunciaron si no hay ningún delito de su parte, dijo que “no hay 11 personas que me acusan, hay 11 testimonios”. Ante la pregunta de cuántas acusaciones, respondió: “No lo sé, eso tiene que hablar mi abogado”. Sobre cómo sigue su vida tras estas denuncias, contestó que “como hasta ahora, en mi casa, tranquilo”.