El juez especializado en Crimen Organizado de primer turno, Fernando Islas, le concedió la prisión domiciliaria a Lorena Loly Suárez, líder de la organización criminal Los Suárez, integrada también por su hermano Betito y su medio hermano Ricardito Cáceres, que opera en Cerro Norte y Villa Española.
La decisión fue tomada por el juez Islas considerando que está cursando un embarazo. Según explicó el abogado de Suárez, Sebastián Puppo, en declaraciones a Telenoche, está embarazada de tres meses y sufrió complicaciones en el embarazo que hacen necesaria su permanencia en domicilio.
Islas decretó que Loly Suárez pase a prisión domiciliaria total con tobillera electrónica hasta el 25 de abril de 2025, cuando será revisada la medida cautelar. La mujer, de 38 años, fue detenida en octubre, tras nueve meses de investigación policial que incluyeron intercepciones telefónicas sobre ella y otras personas vinculadas al narcotráfico, integrantes de otras facciones que operan en la zona.
A fines de octubre, Loly Suárez fue imputada con prisión por un delito de narcotráfico en la modalidad de negociación, por lo que volvió a prisión luego de haber cumplido condena por homicidio en setiembre de 2023. El operativo que culminó con su detención implicó el allanamiento de ocho viviendas, donde se incautaron armas y drogas y también fue detenido un hombre que pertenece a la organización, quien fue imputado por narcotráfico y atentado.
En diciembre de 2016, Suárez fue procesada por el asesinato de la esposa de Tato Segade, Claudia Silveira, que fue secuestrada por Loly y otros miembros de la organización criminal, que se la llevaron de su casa delante de sus hijos y sobrinos y la ejecutaron de un tiro en la cabeza. Tiempo después del homicidio, fueron asesinados otros testigos del hecho, entre ellos un sobrino de Silveira, cuyo cuerpo apareció calcinado en un auto junto al de su novia, Micaela Saccone, que no estaba involucrada en las actividades de la organización criminal. Durante el tiempo que permaneció en prisión, Suárez estuvo en el piso de mayor seguridad del centro penitenciario y en agosto de 2019 lideró un motín en reclamo de mejores condiciones de reclusión, en el que tomó como rehén a una operadora penitenciaria, que resultó ilesa.
En una rueda de prensa, el ministro del Interior, Nicolás Martinelli dijo que no corresponde hacer consideraciones sobre la decisión de la Justicia: “Si la Justicia entiende que están dadas las condiciones para que tenga una prisión domiciliaria, no me compete a mí emitir opinión al respecto”.