A Rosina Tonarelli dejaron de verla el 13 de agosto de 2022 en las termas de Almirón, cerca de Guichón, donde vivía, en Paysandú. Su cuerpo fue encontrado días después entre escombros en el exbasurero de la localidad.
La noche que desapareció había tenido una pelea con su pareja, Fernando Varietti, de 42 años en ese momento, que tenía antecedentes por violencia doméstica. El hombre inicialmente fue detenido, pero fue liberado por falta de pruebas. Luego volvió a ser detenido y se confirmó que la mató luego de una discusión. Ingresó a su casa rompiendo la puerta y la asfixió.
La Fiscalía de Paysandú, a cargo de Cecilia Irigoyen, llevó adelante el caso. En setiembre de 2022, el hombre fue imputado por homicidio muy especialmente agravado por femicidio y, a su vez, se lo imputó por violencia doméstica y por tenencia no autorizada de armas de fuego. Se dispuso su prisión preventiva de cara a un juicio oral. En este proceso se contó con el apoyo de la Unidad de Litigación Estratégica de Fiscalía.
Ahora, en una sentencia de primera instancia, fue condenado a la pena máxima en Uruguay: 30 años de penitenciaría. Además, se le aplicaron medidas limitativas de seguridad de entre cinco y diez años, que se cumplirán luego de su pena.