La fiscal de Flagrancia de cuarto turno, Brenda Puppo, tomó declaración a las cinco manifestantes del 8M que fueron denunciadas por el Comité Central Israelita del Uruguay (CCIU) por considerar que hicieron manifestaciones antisemitas durante la marcha, en la que mostraron un muñeco con una estrella de David en la frente.

Las cinco mujeres denunciadas dijeron que lo que exhibieron durante la marcha fue una representación artística de la figura del presidente argentino Javier Milei, por representar el patriarcado y ser aliado del gobierno israelí, y una expresión de solidaridad con las 33.000 personas que murieron a causa de los ataques israelíes en Gaza.

Puppo, que en esta etapa del proceso debe definir si hay elementos objetivos para pedir el inicio de una investigación judicial por un delito de incitación al odio, centró su interrogatorio en el origen del muñeco exhibido, cómo fue el armado, con qué propósito y cuál es el objetivo del colectivo Our Voice, al que pertenecen las denunciadas.

Uno de los puntos de discusión es si las manifestantes sabían que la estrella de David representa al pueblo judío. Durante el interrogatorio se les mostró una publicación nazi de la década del 30 con imágenes de víctimas de terrorismo nazi con estrellas de David en la frente y dijeron que nunca las habían visto, señalando que para ellas la estrella de David representa a Israel como Estado, por ser parte de su bandera.

En cuanto a la lanza que atravesaba el muñeco, señalaron que el palo para sostener el muñeco se corrió y agregaron imágenes en la carpeta de investigación con el palo por debajo de la cabeza, al inicio de la marcha. También incorporaron una foto del cartel que llevaban bajo la leyenda “nunca antisemita, siempre antisionista”, como evidencia que no se trataba de una manifestación contra los israelíes.

La fiscal Puppo también les preguntó si se habían manifestado en contra de la guerra entre Rusia y Ucrania, mientras que el abogado denunciante les consultó sobre si alguna vez se habían manifestado por los derechos de las mujeres y minorías en Gaza.

En diálogo con la diaria, el abogado de las denunciadas, Maximiliano Dantone, dijo que la denuncia del CCIU tiene “una finalidad de censura, de coartar la libertad de expresión de una intervención artística realizada por un grupo de mujeres que lo que querían era solidarizarse con las víctimas de un actual genocidio”.

En esa línea, señaló que la expresión de sus defendidas coincide con “decenas de resoluciones de las Naciones Unidas y sentencias de la Corte Internacional de Justicia”. “Acá lo fundamental son las intenciones, si quisieron incitar al odio y al desprecio. Ellas quisieron incitar a la solidaridad con las víctimas de Gaza”, agregó.

El representante legal del CCIU, Jaime Apoj, dijo a la diaria que durante la instancia quedó claro que las personas denunciadas “están en contra de la existencia de Israel como Estado” y descartó que se tratara de una manifestación en contra del ataque israelí a Gaza.

Apoj dijo que las denunciadas “dieron explicaciones que, en mi opinión, no fueron muy satisfactorias, porque es evidente que hay una línea de sensibilidad distinta hacia el tema sionismo y judaísmo que hacia cualquier otra situación”, y agregó que fueron consultadas sobre si se manifestaron por los ataques de Hamas contra mujeres y niños en Israel, el 7 de octubre.

“Todas declararon que era una manifestación artística, pero la manifestación artística, la libertad de expresión, también tiene límites y el límite es cuando ofendemos a los demás. Si el cartel hubiera sido ‘gobierno israelí genocida’, calladitos todos la boca, pero no, eso era algo más”, opinó.

El delito de incitación al odio está definido en el artículo 179 bis del Código Penal y prevé de tres a 18 meses de prisión para quien “públicamente o mediante cualquier medio apto para su difusión pública incitare al odio, al desprecio, o a cualquier forma de violencia moral o física contra una o más personas en razón del color de su piel, su raza, religión, origen nacional o étnico, orientación sexual o identidad sexual”.

Según supo la diaria, la fiscal Puppo analiza convocar a otras personas vinculadas a la organización Our Voice a declarar ante la Fiscalía, antes de determinar si pide a la Justicia la imputación de las denunciadas o el archivo del caso.