El juez en lo penal de 31 turno Emilio Baccelli dispuso la formalización del proceso contra dos cirujanos pediátricos y una internista en la causa que investiga el fallecimiento de un bebé de 13 meses, tras una intervención quirúrgica realizada en el Casmu, en abril de 2024.
Según supo la diaria , el juez Baccelli aceptó el pedido de la fiscal Sylvia Lovesio, por entender que había evidencia suficiente para comenzar una investigación por homicidio culposo en el caso de los médicos y por encubrimiento en el caso de la internista, todos con fijación de domicilio como medida cautelar por 150 días.
Ni la fiscalía, ni la defensa de la familia de la víctima, que llevan adelante los abogados Juan Pablo Decia y Alejandro Sobrera, cuestionaron las medidas limitativas por entenderlas suficientes para mantener a los imputados sujetos a proceso. Los médicos fueron defendidos por los abogados.
Fuentes de la investigación explicaron que la teoría de la fiscalía es que se trata de un caso de mala praxis en el que existió un intento de ocultar información respecto del riesgo que implicaba la intervención –una lobectomía toracoscópica pediátrica videoasistida– y su resultado. Según la investigación preliminar efectuada por la fiscalía, el fallecimiento del bebé ocurrió como consecuencia de la intervención, en la que el bebé sufrió el ingreso de sangre en los pulmones.
La defensa de la familia de la víctima hizo un pedido de acceso a la información para conocer cuántas intervenciones de este tipo se llevaron a cabo entre 2010 y 2024, tanto en el sector privado como en el público, lo que dio como resultado que sólo se realizó una intervención videoasistida en la que había participado uno de los imputados como ayudante y 11 en la modalidad abierta. De acuerdo con la fiscalía, a la familia se le transmitió antes de la operación que se trataba de una intervención sencilla, para la que se preveían dos horas de anestesia, pero, sin embargo, duró nueve horas, dado que al no poder realizarla con videoasistencia se terminó en modalidad abierta.
En cuanto al encubrimiento por parte de la internista, uno de los médicos imputados planteó que fue utilizado el usuario en el sistema de la internista para redactar el informe del resultado de la intervención en la historia clínica en la que se consignó que no habían existido eventos adversos en la intervención. No obstante, las fuentes señalaron que el informe de defunción del bebé determinó que había fallecido a consecuencia del ingreso de sangre en los pulmones, ocurrido durante la intervención. Más allá de la versión del médico en cuanto a la participación de la internista, el juez Baccelli consideró que era necesario determinar su responsabilidad en la siguiente etapa del proceso, por lo que accedió a la imputación por encubrimiento.
Sindicato Anestésico Quirúrgico respaldó formación de los médicos actuantes
En un comunicado publicado este jueves, el Sindicato Anestésico Quirúrgico expresó su “más sincera solidaridad” con la familia del bebé fallecido e hizo varias puntualizaciones respecto de la formación de los médicos actuantes.
“Se trata de una situación irreparable y de enorme carga emotiva, que interpela a todo el sistema de salud y obliga a reflexionar sobre el sentido último de nuestra profesión: el cuidado de la vida y la salud”, señalaron.
En el comunicado plantearon que “los profesionales que llevaron adelante el procedimiento cuentan con la formación académica y la experiencia necesarias para este tipo de intervenciones, formando parte del grupo de especialistas con mayor capacitación en esta área en nuestro país”.
Además, explicaron que los programas académicos de la Facultad de Medicina de la Universidad de la República “contemplan específicamente la formación en cirugía de tórax dentro de la especialidad de cirugía pediátrica, siendo estos especialistas quienes históricamente han llevado adelante este tipo de terapéutica quirúrgica en niños de forma casi exclusiva”.
Asimismo, llamaron a otros médicos a no hacer declaraciones públicas sobre la intervención “sin contar con la expertise específica necesaria”, y marcaron la importancia de la idoneidad técnica de los peritos que actúen en la causa.
“Lo anterior no implica desconocer la importancia de una discusión amplia y seria con otras especialidades médicas, que permita aportar elementos para comprender las causas de la evolución indeseada del caso”, agregaron.