Bárbara Prieto fue violada y asesinada en Rivera en abril del año pasado. Se dirigía a donde estudiaba, el Instituto de Formación Docente, cuando un hombre la interceptó y la obligó a ir a un terreno baldío detrás del shopping Melancia. El agresor, Anderson Isaías Sosa Escotto, fue detenido e imputado por el crimen.
El juicio oral de este caso comenzó en diciembre. La Fiscalía de Rivera de tercer turno, a cargo de la fiscal Alejandra Domínguez, investigó el caso. Este viernes el juicio concluyó con la condena máxima para el agresor, que tenía 20 años cuando cometió el crimen. Se obtuvo una condena de 30 años de penitenciaría, y entre cinco y 15 años de medidas de seguridad eliminativas, que es el máximo que establece el ordenamiento jurídico en Uruguay.
El agresor fue condenado por homicidio muy especialmente agravado por femicidio y por haberse cometido con graves sevicias –porque el cuerpo de la víctima presentó varias heridas de arma blanca que reflejan la crueldad con la que fue asesinada–. Además, se comprobó que el femicidio se concretó porque la víctima fue agredida sexualmente antes de ser asesinada.