El jueves 12 de octubre tendrá lugar en Montevideo una subasta que concitará atención en diversas partes del mundo. Entre un lote de 199 piezas de arte, se destacan 60 hojas mecanografiadas, conservadas “en buen estado” y que contienen 46 relatos que dieron origen a Historias de cronopios y de famas, del célebre libro del escritor argentino Julio Cortázar. Además, el paquete incluye un puñado de inéditos.

La cita será en la casa de subastas Zorrilla, porque los manuscritos fueron encontrados en nuestra capital. “Estaban en una biblioteca particular aquí en Montevideo, de un señor que falleció ya hace un par de años”, contó a la diaria Guillermo González, catalogador del mencionado negocio. “El hijo estaba poniendo en orden todo lo que había en esa biblioteca, y en una caja de cosas sin inventariar apareció este documento”, agregó, y admitió que no se sabe cómo terminó ahí.

“La catalogación la hizo Roberto Vega de la casa Hilario de Buenos Aires”, que “tiene una trayectoria enorme en este tipo de piezas”, explicó González. “Es un tema de confianza en el experto o en el conjunto de personas muy capacitadas para hablar del tema, y que coincidan en que se trata de una pieza original, tal y como la estamos presentando”.

Se consultó a dos “autoridades” en letras y textos cortazarianos, el profesor uruguayo Aldo Mazzuchelli y el argentino Lucio Aquilanti, autor de Todo Cortázar (2014) y uno de los mayores coleccionistas de la obra del autor de Rayuela. “Entre ellos llegaron a la conclusión de que tiene toda la apariencia de ser un mecanoscrito original de la obra”, dijo el rematador.

De los 46 relatos, 35 aparecieron “casi sin variantes” en la primera edición del libro, publicada por Editorial Minotauro de Buenos Aires en 1962. Otros cuatro fueron publicados más adelante y siete permanecieron inéditos. “Una obviedad al inicio: son hoy muy escasas las oportunidades de encontrar originales desconocidos de Julio Cortázar. Ni que hablar de descubrir inéditos del escritor argentino”, comenta Mazzuchelli en el catálogo oficial.

“Sin embargo, hace algo más de un año me contactaron en Uruguay para pedirme opinión, porque habían hecho un inesperado hallazgo. Al fondo de un cajón de libros aún no catalogados, perteneciente a la biblioteca de una familia local adquirida hace décadas por el padre de quien me consultaba, aparecía un conjunto de textos mecanografiados que, a primera vista, conectaban con la famosa colección de prosas breves”, agrega el académico. “Desde el punto de vista literario, teniendo en cuenta la época y el contexto compositivo, el estilo, el idiolecto del autor y los temas, no había en principio razones sólidas para pensar que estas páginas no fueran auténticas”.

Aquilanti, mientras tanto, dijo de su propia investigación: “En mi carácter de librero anticuario y de coleccionista e investigador de la obra de Julio Cortázar, puedo afirmar sin lugar a dudas que se trata de un original del autor, mecanoscrito, de extraordinaria trascendencia”.

“Sabemos que Julio Cortázar tuvo una máquina de escribir Royal durante muchos años, al menos hasta 1966, cuando su esposa Aurora Bernárdez adquirió una Olivetti Lettera 32. Al contrastarlo con otros originales podemos observar que está tipeado en la misma máquina de escribir con la que el autor producirá cuatro años más tarde, en 1956, varios textos que multiplicaría en su casa con ayuda de un mimeógrafo. Queda claro entonces que la presente pieza no es una reproducción mimeografiada ya que dicho aparato fue adquirido en un remate de la UNESCO, recién en el año '56”, agregó. Y cerró diciendo: “No han sido pocas las veces que mi carrera de librero, coleccionista e investigador, me ha deparado sorpresas, pero sin duda, esta ha sido de las más cronopias”, afirma el experto argentino.

González dio detalles de la mecánica que tendrá el remate. “Todas nuestras subastas son subastas presenciales que se hacen en el salón de Zorrilla en la calle Soriano 990, y se transmiten en vivo por dos plataformas: una de Estados Unidos que se llama Invaluable y una francesa que se llama Drouot. En esas dos plataformas, donde estamos nosotros y un montón de casas de subastas de todo el mundo, uno se puede hacer su usuario y hacer ofertas previas, seguir el remate en vivo y pujar en el momento desde cualquier parte del mundo”.

Otras joyas: retrato de Rivera y papeles de Pivel

Los 199 lotes a subastarse ese día tienen orígenes variados, contó González. “Hay piezas que vienen de esa biblioteca y otras que vienen de otras bibliotecas. Hay muchas piezas de la biblioteca de Pivel Devoto, otras que vienen de la colección de Alfredo Folle, que era un gran coleccionista acá en Montevideo”. Consultado sobre alguna otra pieza que pudiera concitar la atención, dijo que a nivel internacional son los textos de Cortázar, que tendrán un precio base de 12.000 dólares y un valor estimado de entre 15.600 y 21.000 dólares. Pero hay al menos una joya oculta.

“A nivel uruguayo, la pieza más destacada es un retrato de Fructuoso Rivera, que está fechado en 1829, hecho por Juan Manuel Besnes e Irigoyen”. Se trata de un retrato ecuestre de 75 centímetros x 58 centímetros, en tinta sobre papel. “Es una pieza de verdad muy importante para la iconografía uruguaya, y dentro de la obra de Besnes e Irigoyen, también”. La obra tiene un precio base de 20.000 dólares y un valor estimado de entre 30.000 y 40.000 dólares.