Durante la última sesión de la Junta Departamental de Maldonado, este martes, la edila por el Partido Colorado, Susana de Armas, denunció “depredación ambiental” en el arroyo El Potrero y zonas linderas, tras ser alertada por los vecinos para que trasladara la preocupación al legislativo departamental. Sobre todo, la edila apuntó contra la deforestación que se está llevando a cabo y la destrucción de las dunas que bordean el arroyo.

“La gran depredación que se está realizando de estos montes hacia el lado de la costa principalmente es disparatado. Montes hermosos, propios del paisaje cotidiano [...] que en poco tiempo han sido arrasados, literalmente aniquilados. Igualmente pasa con los médanos que allí había, que en este momento en lugar de encontrarnos con médanos, nos encontramos con grandes pozos”, lamentó.

De Armas criticó los grandes volúmenes de arena que fueron removidos en la zona y cuestionó cuáles fueron los motivos para hacerlo, si existen permisos que avalen la extracción de arena o quiénes fueron los responsables de esas prácticas.

Según relató un vecino de Chihuahua, existe un “saqueo de arena y tala de árboles sin criterio y fuera de control”, que han llevado adelante algunas personas con “diferentes intereses, haciendo pedazos nuestra naturaleza”, contó De Armas. En ese marco, la edila consideró que recuperar el ecosistema es una tarea muy “difícil, por no decir imposible”, y presentó un video que ilustra sus palabras.

Además, recordó la importancia histórica que posee El Potrero en el departamento y resaltó la diversidad de fauna y vegetación nativa, que forman parte del ecosistema costero.

“Uno de los lugares que invita al ecoturismo es, justamente, el arroyo El Potrero, desagüe de la Laguna del Sauce que la une con el Río de la Plata, zona enmarcada por grandes médanos, lugar apropiado para la práctica de diferentes deportes y travesías, además de contar con una fauna autóctona extraordinaria. No podemos perder de vista nuestro sello, nuestra identidad como lugar natural”, concluyó.

Por último, solicitó que sus palabras fueran enviadas al Ministerio de Ambiente, al Ministerio de Turismo, a la Dirección de Gestión Ambiental de la Intendencia de Maldonado y al Municipio de Maldonado.