El expresidente argentino Mauricio Macri fue procesado sin prisión preventiva, pero con un embargo de 100 millones de pesos sobre sus bienes, por el juez federal de Dolores Martín Bava, quien consideró al político y empresario de 62 años como “autor” de espionaje ilegal contra los familiares de las víctimas del submarino ARA San Juan, hundido en noviembre de 2017.

Según informó la agencia Télam, luego de analizar la prueba y tomarle declaración, el juez Bava estimó que prima facie Macri es “penalmente responsable del delito de realización de acciones de inteligencia prohibidas en carácter de autor en virtud de haber posibilitado la producción de tareas de inteligencia ilegal”.

El fallo también establece que el expresidente no podrá salir del país, medida que regirá cuando Macri regrese de Chile, donde fue recibido este miércoles por el presidente Sebastián Piñera.

Además de sufrir un embargo en sus bienes de 100 millones de pesos argentinos –aproximadamente 990.000 dólares– el exmandatario “no podrá ausentarse de su lugar habitual de residencia por un término mayor a los diez días sin previo aviso al tribunal”, establece el fallo.

El juez Bava, severamente cuestionado por Macri, quien lo acusó de actuar políticamente en la causa y de estar al servicio del kirchnerismo, consideró que el exmandatario fue responsable de “haber posibilitado, generado las condiciones, acumulado información, hacer uso y no haber dispuesto el cese de la realización de tareas de inteligencia expresamente prohibidas por la Ley 25.520”, sobre los familiares de las víctimas del ARA San Juan entre diciembre del año 2017 y finales del año 2018.

“Esas acciones [de espionaje] buscaban influir en la situación política e institucional del país, puntualmente respecto a los reclamos que realizaban los mismos por el hundimiento del referido submarino y la consecuente muerte de sus familiares, como así también apuntaban a conocer sus actividades, los lugares donde se reunían, sus datos personales y los de su entorno, como la identificación de sus referentes y los reclamos que realizarían”, señaló el juez.

La causa en la que este miércoles quedó procesado Macri se inició en setiembre del año pasado, a raíz de la denuncia de la titular de la Administración Federal de Inteligencia (AFI), Cristina Caamaño, sobre la aparición de documentos en la delegación Mar del Plata que daban cuenta de espionaje ilegal sobre los familiares del ARA San Juan.

Por el mismo expediente, el juez federal procesó a principios del mes pasado al extitular de la AFI y a su segunda en la jerarquía, Gustavo Arribas y Silvia Majdalani, además de otros involucrados.

La defensa de Macri, encabezada por el exfiscal Pablo Lanusse, sostuvo como estrategia que los documentos hallados eran producto de las tareas vinculadas a la seguridad presidencial y en este sentido pidió que el juez indagara a funcionarios vinculados a esas gestiones.

Fuentes de la defensa del expresidente aseguraron a Télam que apelarán el procesamiento, con lo cual será la Cámara Federal de Mar del Plata la que decidirá si Macri continúa procesado o no.