Eduardo del Castillo, ministro de Gobierno del Ejecutivo boliviano que encabeza el presidente Luis Arce, desafió este lunes en una conferencia de prensa al exmandatario Evo Morales a que entregue el vehículo en el que, según denunció, sufrió un “atentado”, el domingo en el Trópico de Cochabamba.
“Señor Morales, si usted no tiene nada que esconder, lo convocamos a que entregue ese vehículo al Ministerio Público y a la Policía Boliviana y hagamos un microaspirado para saber qué había en el interior de ese vehículo”, dijo Del Castillo durante la conferencia, que fue consignada por el diario paceño La Razón.
Contrariando la versión que había dado el domingo Evo Morales, Del Castillo afirmó que el vehículo que usaba el expresidente eludió un punto de control antidrogas en la carretera que une los municipios de Villa Tunari y Chimoré, ambos situados en la región del Trópico de Cochabamba, el bastión del líder histórico del Movimiento al Socialismo (MAS).
Según la versión dada por Del Castillo, al encontrarse con el control policial, el vehículo de Morales, y su comitiva, aceleró su marcha y hasta atropelló a un efectivo policial, y al alejarse abrió fuego en contra de los policías que comenzaron a seguirlo.
“¿Qué estaba escondiendo Evo Morales en su vehículo y por qué no quiso ser requisado? Señor Morales, ¿quién les ha dado permiso para utilizar armas de fuego?, ¿quiénes son las personas que se encontraban armadas en su vehículo?”, preguntó Del Castillo.
Según Morales, los policías dispararon a las llantas de la camioneta en la que se transportaba, pero el ministro ironizó: “Nadie le cree que una persona pueda manejar a (una velocidad de) 170 kilómetros por hora sin las llantas (en funcionamiento), porque supuestamente le habrían disparado. Yo quisiera conocer una persona en el mundo que pueda manejar a 170 kilómetros por hora con dos llantas reventadas, supuestamente, por impacto de armas de fuego”.
Antes de la conferencia ofrecida por el ministro Del Castillo, Morales había advertido en un mensaje en su cuenta de X que el gobierno “intentará desviar la atención del atentado criminal contra nuestras vidas, con la versión falsa y mentirosa de que se trataba de un operativo antidroga realizado en el Trópico de Cochabamba”.
Luego de las acusaciones planteadas por Del Castillo, Morales negó esa versión y aseguró que en su comitiva no se llevaba armamento, de acuerdo a lo que publicó el portal local Erbol.
Morales insistió en su versión de que el gobierno de su rival político Luis Arce planificó y ejecutó un operativo policial para acabar con su vida. “Hay muchas pruebas de que nos emboscaron, pero dicen que nosotros disparamos. Ninguno de nosotros llevaba ningún tipo de armamento”, publicó el exmandatario en sus redes sociales.
El expresidente acusó al gobierno de Arce de tardar 30 horas para “montar una mentira” y “convertir a la víctima en victimario”. Aseveró que está dispuesto a una investigación internacional por parte de dos organismos, la Alternativa Bolivariana para los Pueblos de América o la Comunidad de Estados Latinoamericanos y Caribeños.
Por su parte, el senador evista Leonardo Loza señaló que hubo “contradicciones” desde el gobierno, porque primero el viceministro Roberto Ríos habló de un “autoatentado”, luego el presidente Arce ordenó investigar un “presunto atentado”, y ahora Del Castillo sostiene que la balacera fue contra los policías.
Loza criticó que el gobierno no se pone de acuerdo ni para eso y que, en vez de aclarar, salió a “ensuciar” el caso.