
Dejarlo todo por defender la vida | Aura Lolita Chávez
Ixcaquic, del pueblo maya quiché, debió dejar Guatemala y la comunidad por la que luchó casi dos décadas asediada por el acoso estatal y la violencia de grupos armados irregulares. Pero lo que más le duele es el desconocimiento y la falta de diálogo de Occidente con su cultura. No cree en dioses, sino en la fuerza del agua, en lo que tiene para decirnos la biodiversidad y en su cuerpo, que es el de todas las mujeres mayas.