El anuncio del futuro gabinete chileno realizado por el presidente electo, Sebastián Piñera, creó una gran expectativa porque delinearía el gobierno entrante de derecha, pero también por el anuncio de que incluiría a dirigentes de la centroizquierdista Concertación. Ayer Piñera presentó los nombres de sus ministros, seis mujeres y 16 hombres, todos con educación terciaria y con un perfil más técnico que político.

Se supo que Jaime Ravinet era el integrante de la Concertación colado en la lista, militante de la Democracia Cristiana y designado ministro de Defensa, cargo en el que se desempeñó durante el gobierno de Ricardo Lagos.

El presidente de la Democracia Cristiana, Renán Fuentealba, había dicho, antes del anuncio, que sería expulsado del partido cualquier dirigente que se incorporara al próximo gobierno. Antes de ser expulsado, Ravinet renunció, y asumirá como ministro el 11 de marzo, junto con el nuevo gobierno, informó el diario chileno El Mercurio.

Piñera cumplió con su palabra de no incluir en el gabinete a ministros de la dictadura de Augusto Pinochet (1973-1990), pero incorporó a su gabinete a personas que tuvieron cargos técnicos en ese período. Es el caso de Juan Andrés Fontaine, próximo ministro de Economía, que entre 1984 y 1990 trabajó en el Banco Central chileno; el de Cristián Larroulet, que asumirá la Secretaría General de la Presidencia y que durante la década de 1980 fue jefe de Gabinete del ministro de Hacienda; y el de Joaquín Lavín, asignado a Educación, que trabajó para el gobierno de Pinochet como asesor de la Oficina de Planificación Nacional y llamó a apoyar a la dictadura en el plebiscito de 1988.

En cuanto a filiación política, el gabinete de Piñera tiene una mayoría de independientes -nueve- y reservó el mismo número de cargos, cuatro, para Renovación Nacional y para Unión Demócrata Independiente, partidos integrantes de la Alianza por el Cambio que impulsó la candidatura de Piñera. A ellos se suman cuatro independientes denominados “pro-UDI”, además del demócrata cristiano.

Otra coincidencia son las profesiones de los próximos ministros. Siete de los 22 son empresarios, otros seis son ingenieros comerciales -profesionales que aplican conocimientos matemáticos, financieros y estadísticos, y que normalmente se desempeñan como asesores de empresas-. El gabinete se completa con abogados, ingenieros civiles, economistas, un cirujano -el nuevo ministro de Salud, Jaime Mañalich- y hasta un actor, Luciano Cruz-Coke, recibido de abogado, que asumirá la secretaría de Cultura.

Otros integrantes del gabinete son Rodrigo Hinzpeter, mano derecha y vocero de Piñera, como ministro del Interior, Alfredo Moreno en Relaciones Exteriores, Felipe Larraín en Hacienda y Felipe Kast en Planificación y Cooperación.

La secretaria general de Gobierno -que funciona como vocera- será Ena von Baer. A ella se suman las ministras del equipo de Piñera: en Servicio Nacional de la Mujer, Carolina Schmidt; en Medio Ambiente, María Ignacia Benítez; Camila Merino en Trabajo y Previsión Social; Catalina Parot en Bienes Nacionales y Magdalena Matte en Vivienda y Urbanismo.