Un avión no tripulado de la Armada de Estados Unidos fue derribado ayer mientras volaba sobre el estrecho de Ormuz, un hecho que agrega un elemento más a la creciente escalada de tensión entre ambos países. La versión iraní sostiene que el aparato –empleado para operaciones de espionaje– se encontraba sobrevolando sin autorización su espacio aéreo. Los estadounidenses, por su parte, argumentan que en el momento en que fue derribado el dispositivo estaba en espacio aéreo internacional.

“A primeras horas de esta madrugada [jueves], un dron espía estadounidense modelo Global Hawk fue atacado y derribado por la Fuerza Aeroespacial del Cuerpo de Guardianes de la Revolución Islámica tras violar el territorio de la República Islámica en la región frente a la localidad de Kuhmobark, sita en la provincia de Hormozgan”, afirmaba el comunicado del Ejército iraní. El hecho ocurrió cerca del estratégico estrecho de Ormuz, por donde cruza una quinta parte del petróleo mundial, y solamente a 80 kilómetros de las costas de Emiratos Árabes Unidos y Omán. De acuerdo con la versión que dio el Comando Central de Estados Unidos en un comunicado, el avión “fue derribado por un sistema de misiles tierra-aire iraní mientras operaba en el espacio aéreo internacional sobre el estrecho de Ormuz”.

La acción generó la reacción del presidente estadounidense, Donald Trump, quien en su cuenta de Twitter escribió: “Irán cometió un grave error”. Más tarde, durante un encuentro con el primer ministro canadiense, Justin Trudeau, Trump se refirió al tema ante las preguntas de los periodistas. El mandatario calificó de “estúpido” al autor del ataque y advirtió en tono beligerante que no lo toleraría. Sin embargo, matizó sus expresiones afirmando que sospechaba que “alguien cometió un error” e hizo una distinción notoria al sostener que el episodio habría sido mucho más serio si el avión hubiera sido un vehículo pilotado, en lugar de un avión no tripulado. Por su parte, el jefe de la Guardia Revolucionaria iraní, Hosein Salami, advirtió que “el derribo del dron estadounidense es un claro mensaje de que nuestras fronteras son la línea roja de Irán y que reaccionaremos enérgicamente contra cualquier agresión”.

El episodio causó reacciones en todo el mundo. El presidente ruso, Vladimir Putin, aseguró que un ataque de Estados Unidos contra Irán sería una “catástrofe”, al tiempo que expresó su temor por el posible desencadenamiento de un conflicto armado en la región. Putin, que ayer participó en un programa televisivo en el que respondió preguntas de los ciudadanos, puntualizó que Estados Unidos “no descarta usar la fuerza” para contener las potenciales amenazas de Irán, país al que Washington acusa de llevar a cabo una carrera armamentística encubierta. Un ataque, indicó el líder ruso, “sería una catástrofe, por lo menos para la región porque llevaría a una escalada de violencia y tal vez a un aumento de los refugiados”.