El secretario de Estado estadounidense, Mike Pompeo, pidió este martes al primer ministro de Armenia, Nikol Pashinyan, y al presidente de Azerbaiyán, Ilham Aliyev, que “cumplan sus compromisos” para poner fin a los combates que se están registrando en la zona de Nagorno-Karabaj y sus alrededores. A pesar de que hace pocos días las partes acordaran un alto al fuego, el tercero desde que se inició la contienda –los dos primeros tuvieron como parte mediadora a Rusia y el último a Estados Unidos–, los violentos combates continuaron en medio de acusaciones mutuas de haber violado el acuerdo.

Cuando ya pasó casi un mes desde que recrudeció la violencia en la zona de Nagorno-Karabaj, un territorio de 11.458 kilómetros cuadrados –un tamaño similar al departamento de Durazno–, los armenios siguen defendiendo el territorio, al que denominan oficialmente desde 2017 como República de Artsaj. Desde el lado azerí se sigue intentando reconquistar el enclave que les perteneció durante el período soviético, si bien la zona ancestralmente es considerada como una parte de su espacio nacional por los armenios.

De acuerdo a lo que informó EuropaPress, Pompeo mantuvo conversaciones telefónicas con Pashinyan y Aliyev instándolos a “cumplir sus compromisos con el cese de hostilidades y perseguir una solución diplomática” con la mediación del Grupo de Minsk –órgano que integran Estados Unidos, Rusia y Francia– de la Organización para la Seguridad y la Cooperación en Europa. En este sentido, el jefe de la diplomacia norteamericana remarcó que “no hay solución militar al conflicto”, según un comunicado difundido por el Departamento de Estado.

Este martes desde Armenia se denunciaron ataques contra su zona fronteriza con Irán, algo que fue negado desde Azerbaiyán, que a su vez por medios oficiales notificó de muertes de civiles en la localidad de Barda como consecuencia de ataques armenios.

En medio de este escenario de confrontación, el primer ministro armenio Pashinyan dirigió un discurso a la nación en el que expresó que Artsaj cuenta con suficientes medios para resistir, y responderá a las agresiones de Azerbaiyán en el momento preciso.

“El pueblo de Artsaj y todos los armenios lucharán sin tregua (...), y el contrataque, en el momento preciso, será devastador para el enemigo”, afirmó el jerarca armenio, de acuerdo a lo que informó la agencia Efe.

Pashinyan señaló que “hace un mes Azerbaiyán tenía como tarea tomar Artsaj, pero Artsaj, aunque herido, todavía está en pie”.

El primer ministro armenio agregó que la República de Artsaj –que no tiene reconocimiento internacional alguno– cuenta con suficientes armas y potencial para asumir su defensa.

“Tenemos muchos enemigos en el mundo, pero también muchos amigos que han estado junto a nosotros y continuarán a nuestro lado”, afirmó el mandatario.

Pashinyan agregó que “durante esta guerra ha cambiado considerablemente la actitud de la comunidad internacional respecto a Karabaj. Los principales actores internacionales ahora declaran abiertamente que Azerbaiyán y Turquía son la parte agresora”, dijo.

El primer ministro finalizó su discurso diciendo que “el pueblo de Artsaj, el pueblo armenio, todos los armenios, lucharán por cada árbol, cada piedra, cada centímetro y cada milímetro” de sus tierras ancestrales.