La región del Alto Karabaj, también conocida como Nagorno Karabaj (nagorno es una palabra rusa que se traduce como ‘tierras altas’), es un territorio montañoso de unos 4.400 kilómetros cuadrados situado en el este de Azerbaiyán, cerca de la frontera con Armenia.

Aunque jurídicamente la región es azerbaiyana, se considera a sí misma independiente bajo el nombre de República de Artsaj. Ningún país miembro de la Organización de las Naciones Unidas reconoce esta república, que en la práctica está controlada por Armenia.

Armenios y azerbaiyanos se disputan la región desde hace más de treinta años y nunca han alcanzado un acuerdo de paz, por lo que estallan nuevos enfrentamientos ocasionalmente. Uno de los episodios más sangrientos ocurrió en abril de 2016: cuatro días de violencia que dejaron unos trescientos muertos. No obstante, la escalada más grave hasta ahora ha estallado en septiembre de 2020.

El repaso histórico

Nagorno Karabaj está poblado por una mayoría de armenios cristianos y una minoría azerí musulmana. Tras la disolución en 1918 del imperio ruso, que hasta entonces controlaba la región, surgieron la República Democrática de Armenia y la República Democrática de Azerbaiyán.

Las dos repúblicas se disputaban varios territorios, incluido Nagorno Karabaj. Cuando en 1920 Armenia y Azerbaiyán pasaron a formar parte de la Unión Soviética (URSS), Moscú decidió que el Karabaj quedara dentro de Azerbaiyán como una región autonóma. Los armenios de la región no apoyaron esta decisión, pero formar parte de la URSS evitó un conflicto entre ambas comunidades.

Con el debilitamiento de la URSS a finales de los años ochenta, las tensiones entre armenios y azeríes comenzaron a escalar, con choques violentos y masacres de civiles en ambos bandos. En 1988 la asamblea regional de Nagorno Karabaj votó su incorporación a Armenia, pero Moscú no permitió que se ejecutase.

Tras la disolución de la URSS en 1991, la recién independizada Azerbaiyán retiró la autonomía a Nagorno Karabaj. En respuesta, el parlamento de la región organizó un referéndum de independencia el 10 de diciembre de 1991, que se aprobó con el apoyo de los armenios y el boicot de los azeríes.

La región declaró su independencia el 6 de enero de 1992 como la República de Nagorno Karabaj, nombre que en 2017 cambiaría a República de Artsaj. Tras la declaración se abrió una guerra abierta entre Azerbaiyán y los secesionistas, apoyados por Armenia.

Los secesionistas del Karabaj resistieron la ofensiva azerbaiyana y además se hicieron con el control una franja de territorio azerbaiyano que ahora conecta la región con Armenia. El conflicto duró hasta 1994, cuando se firmó un alto el fuego mediado por Rusia, aunque se ha incumplido en varias ocasiones.

En verde oscuro la región del Alto Karabaj, y en verde claro la franja de territorio azerbaiyano ocupado que conecta la región con Armenia. Infografía: Wikipedia.

En verde oscuro la región del Alto Karabaj, y en verde claro la franja de territorio azerbaiyano ocupado que conecta la región con Armenia. Infografía: Wikipedia.

Ese mismo año, la Organización para la Seguridad y la Cooperación Europea creó el Grupo de Minsk, presidido por Francia, Rusia y Estados Unidos, para impulsar un proceso de paz. La propuesta, presentada en 2007 con el nombre de Principios de Madrid, implica que los territorios que rodean la región sean devueltos a Azerbaiyán y que se celebre una consulta para decidir su estatus definitivo.

Sin embargo, sigue habiendo diferencias entre Armenia y Azerbaiyán sobre los detalles del plan, lo que ha impedido que se hagan más progresos. En concreto, ambos países difieren en la fórmula para la consulta popular o en cuándo retirar las fuerzas armenias de las zonas ocupadas.