Este lunes, con la comparecencia de la ministra de Economía y Finanzas, Azucena Arbeleche, comienza formalmente el tratamiento del proyecto de ley presupuestal —aprobado ya por la Cámara de Diputados— en la Comisión de Presupuesto integrada con Hacienda del Senado. La semana pasada se definió la agenda de trabajo, que prevé votar el texto en comisión el 21 de noviembre, comenzar a discutirlo en el plenario del Senado el 30 y finalizar el tratamiento el 3 de diciembre. 

En la sesión de la semana pasada, los legisladores del oficialismo y de la oposición acordaron un protocolo de funcionamiento de la comisión, en atención al aumento de los casos de covid-19 y a que en los próximos días recibirán a un número importante de delegaciones, ya que, al igual que ocurrió en Diputados, deben asistir todos los organismos del Estado abarcados por el presupuesto y además se recibe a organizaciones sociales que plantean sus inquietudes —ya hay anotadas 60 para asistir—.

“Como ustedes saben, lamentablemente parecería ser que hay un recrudecimiento en la ola de contagio del covid-19. Es cierto que la situación está controlada, como lo manifiestan las autoridades, sin perjuicio de lo cual hay una serie de medidas que el Senado ha adoptado, con el consentimiento de los coordinadores de bancada”, explicó en la sesión el presidente de la Comisión de Presupuesto y Hacienda, Gustavo Penadés, del Partido Nacional (PN).

¿En qué consiste el nuevo protocolo? Abarca el “acceso, circulación y permanencia en la comisión, así como en las áreas adyacentes”. Penadés señaló que es “muy similar al que se utilizó” cuando el Parlamento trató la ley de urgente consideración (LUC), que también implicó recibir a varias delegaciones. 

“Agregamos un solo elemento que es importante que todos acordemos. Me refiero a la necesidad del uso de barbijo por parte de todos los senadores en forma permanente o durante el mayor tiempo posible, salvo cuando se hace uso de la palabra. En ese momento sí se autoriza el retiro del barbijo para poder hablar con mayor comodidad. Pedimos a todos, amigablemente, que esto sea estrictamente cumplido. La mesa, en caso de verse obligada, llamará al orden a los legisladores”, dijo Penadés. 

También explicó que más allá de la sala donde sesionará la comisión, se habilitarán otras donde se transmitirá “en pantalla lo que está sucediendo” con el debate, para que desde allí puedan seguir la sesión otros legisladores y los asesores de cada bancada. 

En referencia a los asesores, Penadés informó que “se ha establecido, como criterio, que en sala se va a permitir la presencia permanente de cinco asesores por el Frente Amplio, cuatro por el Partido Nacional, dos por el Partido Colorado y un asesor por Cabildo Abierto, además de, por supuesto, un secretario de bancada por cada uno de los partidos”. 

Para las delegaciones de organismos que asistan a la comisión, el criterio será permitir el ingreso de la misma cantidad de personas que los legisladores que haya en sala (entre 10 y 12, señaló Penadés). Si un ministerio asiste con más funcionarios —lo habitual es que vayan todos los directores y asesores—, el ministro irá autorizando “su ingreso cuando los temas que se vayan tratando requieran su presencia”. 

Al igual que en la comisión de Diputados que analizó el presupuesto, las delegaciones sociales que asistan serán recibidas los viernes —están previstos tres días: 30 de octubre, 6 y 13 de noviembre— y los senadores se dividirán para escuchar los planteos de forma simultánea en dos salas distintas. Penadés dijo que se permitirá “un ingreso máximo de tres personas por delegación”, aunque admitió que puede haber “cierta elasticidad”. 

La senadora frenteamplista Amanda Della Ventura propuso que se eleve a cuatro el número de personas permitido por delegación, lo que finalmente se aprobó. El presidente de la comisión informó que la Cámara de Diputados “quedó sin poder recibir 20 delegaciones”, que tendrán “prioridad para ser recibidas” por el Senado.

A su vez, Penadés planteó a las organizaciones sociales que ya asistieron a Diputados y cuyas inquietudes sobre el presupuesto ya fueron atendidas que “no es necesaria su comparecencia”. Esto no fue aceptado por el Frente Amplio, y el senador Charles Carrera dijo que la oposición está “dispuesta a recibir a toda delegación de la sociedad civil que así lo pida, sin importar si ya fue recibida en la instancia de la Cámara de Diputados”.