Con una agenda intensísima, el presidente estadounidense, Donald Trump, sigue realizando actos de campaña en varios estados del país y en la noche de este lunes cerrará su periplo con un evento en la ciudad de Grand Rapids, en el estado de Michigan, el mismo lugar en el que terminó su campaña hace cuatros años, cuando derrotó a la demócrata Hillary Clinton.
Corriéndola de atrás de acuerdo a lo que indican las encuestas, el mandatario republicano realizó en las últimas horas una larga serie de actos en estados donde todavía no se sabe quién ganará y se quedará con los votos en juego para el Colegio Electoral.
Michigan, Georgia, Florida, Iowa y Carolina del Norte fueron sede de eventos de campaña de Trump, que a pesar de lo que señalan los sondeos no baja la guardia y derrocha su optimismo e histrionismo en cada uno de sus actos. En los últimos días el presidente y su equipo insistieron en que las encuestas subestiman el apoyo con el que cuenta el mandatario, y apuestan a que la “mayoría silenciosa” les dará la reelección.
Cabe aclarar que en Estados Unidos la veda electoral no existe, y es por esta razón que la campaña seguirá hasta último momento.
Por su parte, Joe Biden decidió concentrarse en uno de los estados clave en el camino a la Casa Blanca, Pensilvania, donde este lunes realizará dos actos, en las principales ciudades del distrito, Filadelfia y Pittsburgh. Allí estará acompañado por su compañera de fórmula, Kamala Harris, quien en los últimos días tuvo una intensa actividad, intentando cubrir los baches que deja Biden, que debido a la pandemia de coronavirus se manejó con mucha cautela durante la campaña, evitando los actos masivos y los largos desplazamientos.
Este lunes, Biden visitará además la ciudad de Cleveland, en el estado de Ohio, otro territorio clave.
El domingo Harris estuvo en el sureño estado de Georgia y en Carolina del Norte. También tuvo mucha actividad el compañero de fórmula de Trump, el actual vicepresidente, Mike Pence, que, al igual que Harris, también realizó actos en Carolina del Norte.
En medio de la incertidumbre, ya son más de 93 millones los ciudadanos estadounidenses que votaron por correo o en forma presencial. La afluencia es muy grande y se estima que se superará ampliamente la cantidad de votantes de 2016, lo que de acuerdo a los analistas juega a favor de Biden.
Hablando del favoritismo del postulante demócrata de 77 años, este domingo el diario The New York Times publicó datos de un relevamiento realizado junto con Siena College, una universidad privada del estado de Nueva York, en el que se muestra que Biden tiene una clara ventaja sobre Trump en cuatro de los estados clave.
De acuerdo a los datos, en el estado de Wisconsin Biden tiene 11 puntos de ventaja sobre Trump, 52% contra 41% del republicano de 74 años. En el ya mencionado estado clave de Pensilvania el demócrata está seis puntos arriba de su contrincante, 49-43; números similares se registran en Arizona y Florida, aunque la ventaja es más reducida, 47% a 44%, justo sobre el margen de error del sondeo, que es de 3,2%.
De reflejarse en la realidad, esta situación dejaría al republicano con un margen muy apretado para lograr llegar a los 270 votos que se requieren en el Colegio Electoral para poder adjudicarse el triunfo.
Hablando de este último punto, este domingo el portal de noticias políticas estadounidenses Axios, citando tres fuentes anónimas, informó que Trump planea ignorar los resultados reales de las elecciones y declararse ganador en caso de que los primeros resultados lo muestren por encima de Biden. Según se dice en la nota, Trump viene comentando el tema en su círculo en las últimas semanas, aunque desde su comando de campaña se negó tal versión.
El director de comunicaciones de la campaña de Trump, Tim Murtaugh, le dijo a Axios que esta versión fue pergeñada por quienes “intentan crear dudas sobre la victoria de Trump. Cuando gane, él lo dirá”.
Paralelamente, cada vez parece más claro que no se conocerá al ganador de las elecciones en la noche del martes, sino que habrá que esperar, debido a que en muchos estados no se terminarán de contar los votos por correo. En Pensilvania, por ejemplo, la ley estatal impide que los funcionarios electorales comiencen a contar los votos por correo antes del día de las elecciones.
Es por esto que pueden pasar días, e incluso semanas para saber quién ganó en dicho estado si la votación, como se prevé, es reñida, situación que puede reproducirse en otros estados del país, dados los números récord de estadounidenses que votaron por correo en estas elecciones, básicamente debido a la pandemia.