El Partido Socialista (PS) uruguayo se pronunció sobre las elecciones de este domingo en Nicaragua que le dieron la victoria al presidente Daniel Ortega junto con su esposa Rosario Murillo en el cargo de vicepresidenta, a pesar de estar duramente cuestionada su legitimidad por la comunidad internacional. En un comunicado el PS asegura que “el régimen profundizó la represión con el objetivo de montar una farsa electoral que le permitiera perpetuarse en el poder, persiguiendo y encarcelando u obligando a marchar al exilio a candidatas, candidatos y dirigentes que no fueran marionetas del régimen”.
El Consejo Ejecutivo Nacional del PS retomó una declaración que había hecho en junio en la que condenaba “las graves violaciones a los derechos humanos cometidos en Nicaragua por el régimen encabezado por Daniel Ortega y Rosario Murillo, las que incluyen persecución por parte de fuerzas policiales y paramilitares a la protesta ciudadana y a dirigentes y partidos opositores”. En esta oportunidad los socialistas realizan “un nuevo llamado al gobierno de Nicaragua a la liberación de los presos políticos, al cese de la represión y a reencauzar la situación institucional del país por la senda del diálogo y la democracia”.
En el comunicado tras la reelección de Ortega, el PS asegura que se reprimió la participación de “figuras de valiente e intachable trayectoria en el sandinismo, como el fallecido poeta Ernesto Cardenal o la compañera Dora María Téllez, hoy encarcelada por discrepar con el gobierno”.
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Los socialistas aseguran que la del domingo fue “una votación pero no una real elección”, a su entender “a partir de las elecciones de 2016, se acelera el deterioro de la democracia en Nicaragua. En 2018 las protestas sociales son acalladas al precio de 328 personas asesinadas. Se persiguen dirigentes sociales, se clausura a la prensa opositora y se generaliza un sistema de corrupción desde las alturas, todo lo cual desnaturaliza y traiciona a la Revolución Sandinista que tanto valoramos y apoyamos las y los socialistas uruguayos”.
Desde el PS no se “ignora las políticas injerencistas e imperialistas del gobierno norteamericano y sus intentos desestabilizadores a aquellos gobierno que no se alinean con sus objetivos políticos y económicos”, pero de todos modos analizan la realidad internacional y repudian los hechos acontecidos en Nicaragua porque su causa es “la de la dignidad humana, la libertad, la solidaridad y la igualdad”.