Después del cruce de declaraciones que tuvieron el presidente Luis Lacalle Pou y su par argentino, Alberto Fernández, en la cumbre por los 30 años del Mercosur, el mandatario uruguayo volvió a insistir este lunes en que su gobierno tiene “vocación de que el Mercosur sea un trampolín y no un corsé o un lastre”, los mismos dichos que originaron el entredicho entre ambos presidentes.
El sábado Fernández opinó que el discurso de Lacalle Pou en la cumbre fue “inusualmente agresivo” y “fuera de lugar”, pero el presidente uruguayo no quiso contestarle. En rueda de prensa después de vacunarse contra el coronavirus, Lacalle Pou aseguró que su gobierno tiene “vocación de integración regional, Mercosur, vocación de que el Mercosur sea un trampolín y no un corsé, un lastre”, porque, opinó, el bloque “tiene mucho para darle al mundo”.
“Hoy creo que somos la quinta región más proteccionista del mundo, y miramos y tenemos los monstruos asiáticos generando más mercados, consumiendo lo que se produce no en Uruguay, en la región, entonces parece lógico que para el progreso de nuestros pueblos, para que haya inversión, para que haya trabajo, nos abramos al mundo”, consideró.
Dijo que es “entendible” que otro país diga que “no me convence”, “lo que no podemos pensar es que porque a un país no le convenga, nosotros quedarnos atados, eso es lo que estamos pidiendo. No hay uno contra otro, al revés, es el bien de todos; si alguno entiende que no es para su bien, que nos aflojen un poco la piola, que se flexibilice el Mercosur, que podamos avanzar a distintas velocidades, como ya se conversó con Corea del Sur, o que se flexibilice la decisión 32 del 2000 y que le digan a Uruguay 'andá con los chinos'”, añadió.
El presidente aseguró que las relaciones dentro del Mercosur “tienen que ser de complementación”, y recordó que “desde 2006 se está hablando de la flexibilización” del bloque.
Argentina: “Parece un discurso muy moderno el de la flexibilización, y después se choca con la realidad”
Jorge Neme, secretario de Relaciones Económicas Internacionales de la cancillería argentina, dijo este lunes que lo que ocurrió en la cumbre fue “una anécdota, quizás unas palabras inoportunas o unos conceptos mal elegidos, y eso es lo que causa irritación, otro presidente se siente ofendido, pero es una anécdota”. En una entrevista en En perspectiva, Neme opinó que “si cada país negocia solamente de forma independiente, el Mercosur pierde razón de ser”.
“Si Uruguay firma un acuerdo de libre comercio con China y tiene la frontera abierta de Argentina, Brasil y Paraguay para los productos que China produzca vía Uruguay, nosotros perdemos una enorme capacidad productiva frente a bienes de China que pueden inundar el mercado”, señaló explicando la postura argentina, y se preguntó: “¿Qué quiere decir 'flexibilización'? ¿Cómo se instrumenta eso en el marco del Mercosur? ¿Cómo negocia Uruguay un tratado de libre comercio con Estados Unidos por su cuenta sin el Mercosur?”.
El jerarca argentino pidió que Uruguay explicite su postura por escrito, y opinó: “Parece un discurso muy moderno el de la flexibilización, y después se choca con la realidad, las barreras sanitarias y las medidas que cada uno de los países toma”.