La Mesa Política del Frente Amplio (FA) emitió este viernes un comunicado en el que expresó su “profunda preocupación y dolor” por la escalada de violencia entre Israel y Palestina, que causó la muerte de más de 400 palestinos y unos 12 israelíes antes del alto al fuego anunciado el jueves.
El FA recuerda que la tensión comenzó en Jerusalén Este, con las protestas de palestinos por la inminente decisión judicial que habilitaría el desalojo de quienes viven en territorio ocupado que será destinado a colonias judías. “El actual conflicto fue provocado por los desalojos intempestivos, llevados a cabo por el gobierno de Israel, de familias palestinas en Jerusalén Este y la demolición de sus hogares”, indica el comunicado. Señala que esas protestas fueron “respondidas por parte del gobierno israelí de forma violenta e inaceptable”.
Con el argumento de manifestar su rechazo a la represión de las protestas, Hamas comenzó a lanzar cohetes contra territorio israelí desde Gaza. Ante eso, el gobierno de Benjamin Netanyahu ordenó bombardeos sobre la franja. El saldo de 11 días de fuego cruzado fue de al menos 243 palestinos muertos en Gaza y 12 personas fallecidas en territorio israelí.
En su comunicado, el FA “expresa su solidaridad con todas las víctimas” y “condena todos estos actos de violencia, las violaciones a los derechos humanos, el uso desproporcionado de la fuerza por parte del gobierno de Benjamin Netanyahu y toda forma de represalia que atente contra la población civil, sin excepción alguna”.
Además, en el texto el FA manifiesta su preocupación por la posición del actual gobierno, que manifestó su respaldo a Israel, “solidarizándose solamente con una parte del conflicto”, tanto a través del Ministerio de Relaciones Exteriores como de un llamado del presidente, Luis Lacalle Pou, al embajador israelí.
El comunicado, que fue precedido por un debate interno por las diferencias en el FA, concluye mencionando el alto al fuego y manifestando “la esperanza de que constituya el inicio de un diálogo político necesario para la solución pacífica de las controversias”.