Kamala Harris, la vicepresidenta estadounidense, se encuentra de visita en Guatemala y posteriormente se trasladará a México, en la que está siendo su primera visita a América Latina desde que asumió el cargo, el 20 de enero.

La número dos de la administración que encabeza Joe Biden tiene como principal tema en esta gira la cuestión migratoria. En los últimos meses el número de personas provenientes de México y países centroamericanos que llegaron a la frontera sur de Estados Unidos solicitando asilo alcanzó su punto más alto en más de 20 años. Tomando únicamente los datos de abril, el Servicio de Aduanas y Protección de Fronteras de Estados Unidos registró que llegaron al límite fronterizo con la intención de pedir asilo más de 178.000 migrantes, casi la mitad de los cuales procedía de México y de países centroamericanos, según informó la cadena CNN.

De acuerdo a medios estadounidenses, el gobierno de Biden aún no tiene una estrategia totalmente definida sobre cómo afrontar la situación, pero se tiene conciencia de que lo necesario para frenar el aluvión migratorio es mejorar las condiciones de vida en los países de los que salen forzadamente esas personas que con frecuencia pasan penurias en su periplo hacia el norte.

En ese sentido, hace tres semanas Harris anunció que el gobierno de Estados Unidos había llegado a un acuerdo con 12 importantes empresas privadas para comenzar un plan de inversión en el llamado triángulo norte (Guatemala, Honduras y El Salvador) tendiente a generar trabajo y desarrollo en la zona.

La pobreza, la inseguridad y los altos niveles de corrupción son los principales factores que se deben combatir para revertir la situación social en la mayor parte de los países centroamericanos, y en ese sentido la visita de Harris a Guatemala y México es significativa, porque fue a ella a quien Biden le encomendó en primer lugar que comandara los esfuerzos diplomáticos respecto de la cuestión de los migrantes. Harris se reunió el lunes con el presidente guatemalteco, Alejandro Giammattei, y este martes estará en territorio mexicano, donde se encontrará con el mandatario Andrés Manuel López Obrador. Este último había consolidado una férrea alianza con el expresidente Donald Trump, por lo que otro de los retos de Harris en esta gira será recomponer en otros términos su relación con la administración de López Obrador.

La visita de Harris a Guatemala y México se da apenas una semana después de la que realizó el secretario de Estado estadounidense, Antony Blinken, a San José, la capital de Costa Rica.

En dicha ciudad el jefe de la diplomacia estadounidense se reunió con los ministros de Relaciones Exteriores de Costa Rica, Guatemala, Honduras, El Salvador, Nicaragua, Panamá y México. En el encuentro Blinken destacó la importancia de contar con instituciones democráticas sólidas y del compromiso con la lucha contra la corrupción. En el marco de esta visita a Costa Rica, Blinken fue directo y les pidió a los centroamericanos que no sigan yendo hacia Estados Unidos. “Demasiados jóvenes de la región anhelan desesperadamente una vida mejor, por lo que lo arriesgan todo para emprender un viaje muy peligroso hacia el norte”, afirmó el funcionario, que agregó que “la gente muere en el camino, se enfrenta a la violencia, y los que llegan a nuestra frontera son rechazados, porque la frontera no está abierta”.