La Unión Europea (UE), así como otros gobiernos, criticaron este miércoles la composición del nuevo gobierno de Afganistán.
Si bien los talibanes luego de conquistar Kabul aseguraron que conformarían un gobierno inclusivo con otras fuerzas políticas del país, el martes dieron a conocer su gabinete, integrado enteramente por personas pertenecientes a la organización extremista islámica y casi todos ellos de la etnia pastún, a la que pertenecen aproximadamente 40% de los afganos.
“La UE toma nota del anuncio de gobierno interino por parte de los talibanes. Después de un análisis inicial de los nombres anunciados, no parece que sea la formación inclusiva y representativa en términos de riqueza étnica y diversidad religiosa que esperábamos ver y que los talibanes prometieron las últimas semanas”, indicó un portavoz de la UE al portal Europa Press.
El gobierno interino tendrá al frente al mulá Mohammad Hasán Ajund como primer ministro y jefe de Estado, mientras que el mulá Abdul Ghani Baradar, líder político de la organización, será su número dos. El bloque europeo recordó que contar con un gabinete inclusivo es una de las condiciones que impuso para tratar con el Ejecutivo afgano. Por esa razón reclamó que el futuro gobierno de transición, que salga de un proceso de negociación, cumpla con dichos parámetros. A propósito de este tema, el ministro de Relaciones Exteriores alemán, Heiko Maas, agregó que la composición del gobierno afgano dejaba poco lugar para el optimismo acerca de un cambio de postura de los talibanes respecto de lo que fue su primer gobierno, entre 1996 y 2001, conocido mundialmente por sus aberrantes violaciones de los derechos humanos, particularmente los de las mujeres.
También el gobierno de Estados Unidos manifestó sus reservas respecto de las relaciones que tendrá con Afganistán. En una entrevista con la cadena afgana Tolo News, el secretario de Estado estadounidense, Antony Blinken, dijo que el futuro dependerá de las “acciones” que tomen los talibanes.
“Veremos lo que sucede con sus acciones, si corrigen el rumbo de alguno de estos incidentes de conducta abusiva. Eso va a ser muy importante. Si esas políticas son de hecho llevadas a cabo”, expresó el jefe de la diplomacia de la administración de Joe Biden.
Pero al parecer las políticas de los talibanes, tal como era previsible, más allá de sus declaraciones, se asemejarán bastante a las de su primer gobierno, al menos en lo concerniente al rol de la mujer.
Este miércoles el subdirector del Ministerio de Cultura, Ahmadullah Wasiq, dijo que a las mujeres afganas se les prohibirá practicar cualquier tipo de deporte, incluyendo el críquet, uno de los más populares del país.
En una entrevista con la emisora australiana SBS, consignada por el diario inglés The Guardian, Wasiq dijo que el deporte femenino no se consideraba apropiado ni necesario de acuerdo a la interpretación que los talibanes tienen de la sharia, la ley islámica. “No creo que a las mujeres se les permita jugar al críquet. En el críquet es posible que se enfrenten a una situación en la que no se cubran la cara y el cuerpo. Y el islam no permite que las mujeres sean vistas así”, afirmó el funcionario.
“Es la era de los medios, habrá fotos y videos, y luego la gente lo verá. El islam y el Emirato Islámico [Afganistán] no permiten que las mujeres jueguen al críquet o practiquen el tipo de deportes en los que se vean expuestas”, agregó Wasiq.