El movimiento Un Solo Uruguay (USU), fundado en 2018, realizó este domingo el ya tradicional acto anual de cada 23 de enero, nuevamente en la Sociedad Rural de Durazno. La proclama de este año estuvo centrada en reivindicaciones puntuales y no profundizó en un análisis más general de la realidad nacional, algo que USU acostumbró en sus primeras manifestaciones públicas. Hubo cuestionamientos a los beneficios a las grandes empresas y la promoción de inversión extranjera, además de plantearse medidas vinculadas a la problemática de la sequía y el manejo de los recursos hídricos. Además, tras la lectura de la proclama se realizó un “cabildo” entre los asistentes, en el que se intercambiaron opiniones.

La proclama leída por Guillermo Franchi, uno de los voceros de USU, comienza con una crítica a la “promoción de inversiones de las grandes empresas a través de beneficios tributarios y hasta subsidios abundantes”, en detrimento de los pequeños productores, “aquellos que son, nada más ni nada menos, 97% de las empresas del país” y que, al entender de USU, “son los que realmente mueven la economía, los que no acumulan nada y reinvierten todo lo que perciben y a veces más, a través de créditos”. Vinculado a este punto, se puso como ejemplo “el contrato con UPM II”, la planta de celulosa que se está construyendo en Pueblo Centenario, en el límite entre Durazno y Tacuarembó.

Por otro lado, el problema de la sequía fue el que se llevó mayor parte de la proclama. Al respecto, se propusieron una serie de posibles medidas de apoyo, como la importación libre de gravámenes de equipos de riego y maquinarias para realizar las obras necesarias; exoneración de tributos acorde a la inversión, “como se hace con las grandes empresas”; créditos a plazos “razonables y con costos acordes” por parte del Banco República, y la fijación de una tarifa productiva en energías –electricidad y combustibles–.

Enlazado con la sequía, en su discurso USU abordó el uso de los recursos hídricos y asoció su mal uso con los incendios forestales: “La intercalación de cultivos y pasturas bajo riego y la mayor reserva de aguas servirían y mucho para la contención y el combate de este tipo de fenómenos”.

La proclama finalizó con un sutil llamado de atención al gobierno de Luis Lacalle Pou: “‘Gobierno campero’ o ‘si al agro le va bien, al país le va bien’ son frases muy escuchadas en los últimos tiempos, pero varios pequeños productores vienen tirando la toalla en el rubro ovino, gran resistente a las sequías, porque ni siquiera se les ha dado la solución al tema [de los] perros sueltos, que destrozan majadas y sueños”, manifestó Franchi. “Aquí es donde vemos la consideración de una urgente discusión”, finaliza el texto, en una alusión a la ley de urgente consideración (LUC) impulsada por el Poder Ejecutivo.

Da Silva: la LUC y las críticas por “blanditos”

Entre las figuras del Partido Nacional presentes en el cabildo que se generó luego de la lectura de la proclama estuvo el senador Sebastián da Silva, que “reivindicó” en USU “un termómetro claro de la realidad nacional”. Aunque dijo compartir la proclama y reconoció que muchos de los planteos de la organización el gobierno no los pudo responder aún, aseguró que esto no se debe a que el gobierno no sea “campero”: “Yo reivindico esa frase mía que dijo Guillermo [Franchi]; este es uno de los gobiernos más camperos de la historia contemporánea. Este no es un gobierno que hace Antel Arena, es un gobierno que pone antenas donde antes los gurises tenían que amucharse abajo de un árbol para poder estudiar”, expresó.

Por otro lado, Da Silva sostuvo que “hay un país que nos desprecia profundamente” –en referencia a los productores– y defendió la necesidad de priorizar el referéndum contra la LUC: “Nadie piense que si perdemos la LUC van a llegar buenas noticias para el país productivo. Va a venir un ministro de Ganadería en helicóptero confundiendo la soja con lo verde, para decretar emergencia agropecuaria. No va a haber un gobierno que la decrete inmediatamente”, advirtió.

Asimismo, y en presencia del senador y líder de Cabildo Abierto, Guido Manini Ríos, el senador blanco dijo que “hay un Uruguay de pandemia insoslayable; a mí lo de que somos blanditos, que no hemos hecho nada me revienta profundamente, porque hay que estar en el cuerpo de cada uno de los que están en el gobierno para ver cómo se han deslomado”. En un acto en noviembre, Manini afirmó que el gobierno “va en la dirección correcta”, pero que le “duele la lentitud de las cosas”; “hay cierta tibieza que es lo que a veces nos saca un poco de las casillas”, manifestó el senador en esa ocasión.