Una de las salas de conferencias del hotel Hyatt fue testigo de la reunión que mantuvo el directorio del Partido Nacional (PN) con senadores, diputados y dirigentes blancos, para “mirarse al espejo”, como dijo la vicepresidenta de la República, Beatriz Argimón. El motivo de la reunión del lunes fue el análisis de un estudio encargado a la consultora Equipos para evaluar, por medio de un focus group, las fortalezas y debilidades que observa la ciudadanía respecto del principal partido de la coalición de gobierno.
Según explicó el diputado Mario Colman a la diaria, “lo que se trata de buscar es en el electorado a quienes de cierta forma son un voto cercano al PN” y ver cómo se comporta esa porción de la sociedad. Lo que arrojó el estudio, según explicaron desde el PN, es que los límites marcados intra coalición de gobierno comenzaron a difuminarse para los electores; es decir, hay un traspaso más fácil de votos entre los distintos partidos que la integran.
Para Colman es una forma “menos ideológica y más pragmática de ver la política”. Dijo creer que esto se da “no necesariamente por la conducta de los partidos sino por el comportamiento de la sociedad; lo que la gente visualiza no va en ideologías sino en la respuesta a los problemas”. Este es un proceso que se da, según el diputado, “cuando empezás a trabajar en conjunto”.
Para el también diputado Alfonso Lereté, el PN tiene “una obligación muy relevante por el apoyo que tuvo en octubre, que se notó con sus diputados y senadores, que son la bancada mayoritaria dentro de la coalición”. Además, el presidente de la República proviene de filas nacionalistas, lo que a juicio del legislador convierte a su partido en “la columna vertebral” del conjunto de grupos políticos que forman el oficialismo.
Sin embargo, esto “no quiere decir que el esqueleto sea sólo la columna vertebral”, sino que existen “otros complementos de ese cuerpo que son fundamentales”, es decir, los demás partidos. Con los otros socios –hoy cuatro: Partido Colorado, Cabildo Abierto, Partido Independiente y Partido de la Gente–, en un año electoral hasta octubre se da “un régimen de alta competencia”, pero a la hora de la segunda vuelta “lo que existe es a posteriori una cooperación para poder votar juntos y alcanzar eventualmente el gobierno nacional”.
“Competencia siempre va a haber”, aseguró Lereté. De todas formas, reconoció que hoy en día “las fronteras dentro de la coalición quizá ya no sean tan rígidas, es decir, un votante hoy del Partido Colorado mañana circunscrito a la coalición puede acompañar al PN”, aunque consideró que no existe una “pérdida de identidad”.
De cara a 2024, “es inevitable que va a haber una instancia interna” en cada uno de los partidos, para llegar a octubre con una candidatura única, y además lograr mantener o aumentar las bancas de la coalición en el Parlamento. Eso se dará en “un período de unos meses, donde vamos a competir para tener senadores y diputados”, pero luego llamó a “seguir cuidando esta coalición y llegar después a la segunda vuelta con posibilidades reales y concretas de mantener el gobierno”.
Consultado sobre si este diagnóstico de competencia interna no llevará a una diferenciación en el discurso entre los otros cuatro partidos y el gobierno, Lereté consideró que la disputa por el electorado se dará “en la gestión de gobierno”. En esa línea, dijo que “va a haber una competencia de gestiones: fulano gestionó esto, gestionó lo otro, y por eso tenemos el perfil para tener el próximo presidente o presidenta”.
“Después, si te querés diferenciar con propuestas que no fueron parte del Compromiso por el País [documento programático de 2019] y querés generar una nueva agenda de propuestas te podeś diferenciar, pero siempre en clave de coalición”, consideró el diputado.
La estrategia blanca
Lereté aseguró que el tema de las candidaturas “ni se tocó” en la reunión del lunes. Más allá de eso, en una segunda parte del encuentro, los dirigentes del PN se dedicaron a diseñar un plan estratégico de cara a los próximos años, para aumentar su inserción en la sociedad civil. Entre lo hablado, está impulsar “la elección de la Juventud del PN [que será en octubre] para “que siga sirviendo como uno de los esquemas centrales para la renovación”, dijo el legislador.
Esto último lo asoció a que “algo que surgió de los focus groups fue que al PN se lo asocia con lo joven, nuevo, fresco; son palabras que aparecieron, lo que nos ubica como un partido muy de centro”.
Por otra parte, se habló de mantener “una impronta de Montevideo-interior”, aunque fue el propio Lereté –diputado canario– quien sugirió “integrar un elemento fundamental, que es Montevideo-Canelones-interior”, en vista de que, a su entender, el suyo es “el departamento más importante, donde se define la elección”. En la reunión, todos los dirigentes presentes se llevaron como tarea “bajar” las propuestas a sus agrupaciones para comenzar a aplicarlas.