El expresidente José Mujica opinó este viernes sobre la situación de la seguridad en el país, luego de que en los últimos días se registraran varios homicidios en el norte de la capital. En particular, aseguró que a diferencia de otros integrantes del Frente Amplio (FA) que ya pidieron que el ministro del Interior, Luis Alberto Heber, diera un paso al costado, él no lo haría. “Yo no le voy a hacer a este ministro lo que hizo él, andar pidiéndole la renuncia a cada rato; es probable que mis compañeros, en el fragor de la batalla, lo hagan, que vuelvan a cometer el mismo error que cometieron ellos de agarrar al ministro de cabeza de turco”.

“En general, cuando hay problemas en la seguridad el coro inevitablemente de la política le cae al ministro. Así hizo el Partido Nacional y todos los que están en el gobierno hoy, y tiene antecedentes”, dijo Mujica en diálogo con la radio Universal, y recordó que durante el gobierno de Luis Lacalle Herrera el Partido Colorado, liderado por Julio María Sanguinetti, también le pedía la renuncia al ministro. “Es casi un estilo en el Uruguay”, resumió.

Mujica entiende que enfrentar la violencia y la inseguridad es “un problema difícil” y a su entender el gobierno de Luis Lacalle Pou cometió un error, en tanto “se inventó un discurso y un relato que se terminó creyendo y el capital acumulado en materia de solvencia, que no lo hicimos nosotros sino los años, es decir, un conjunto de jerarcas de la oficialidad policial que llevaban años combatiendo el narcotráfico y tenían expertise, información y oficio, marcharon a cuarteles de invierno, abruptamente, y se cambió todo y vuelta a empezar de nuevo, y se perdió la experiencia acumulada”.

“Con ese tipo de política no vamos a superar el problema, y tenemos que darnos cuenta de que este es un problema mucho más grave, es multifactorial y no podemos agarrar de cabeza de turco a la Policía, que tiene su responsabilidad”, dijo Mujica, y enfatizó que para él la responsabilidad no es sólo de Heber. Incluso, opinó que el ministro “no se caracteriza por tener una posición humilde; siempre, durante más de 30 años como legislador, estuvo para el grito, pero el país no merece que se siga con esa sintonía. Creo que el gobierno escupió para arriba y está recibiendo la respuesta, pero la realidad es que la tragedia es de toda la sociedad”.

En particular insistió con que el narcotráfico es un punto que hay que atacar, pero “la política represiva viene demostrando a lo largo de los años que está fracasando rotundamente. Hay una fortuna metida, pero es un monopolio con una enorme tasa de ganancia y siempre van a estar los audaces, en estas sociedades donde se tiende a sembrar la idea de que en la vida triunfar es hacerse rico. Como es muy grande la tasa de ganancia, termina corrompiendo por todos lados, creando una doble economía”.

En esta línea mencionó que la legalización de la marihuana que se legisló durante su mandato fue “una primera golondrina para empezar a romper la timidez y el conservadurismo subliminal en nuestra sociedad. Me doy cuenta de que acá tenemos dos problemas: la drogadicción y el narcotráfico. Para luchar contra la drogadicción tenemos que eliminar el narcotráfico; uno es un problema de salud pública y el otro una enfermedad de carácter policial; la única manera que veo de eliminarlo es, precisamente, dejarlo sin mercado”.

El caso Marset “no da como para hacerle una dramática acusación de irresponsabilidad al gobierno”

Mujica también habló sobre la entrega del pasaporte al narcotraficante Sebastián Marset y la interpelación a los ministros Heber y Francisco Bustillo, que insistieron en que legalmente estaban obligados a entregarle el documento por al decreto que se aprobó en el gobierno de Mujica, que a su entender flexibilizó las condiciones de entrega.

Al respecto el mandatario subrayó que “el decreto tenía dos partes, tenía otra parte donde habla que en el caso de dudas hay que consultar, y este caso tenía más que dudas, obviamente, y las tuvo a tiempo el gobierno, así que yo pienso que se llovieron, la burocracia se llovió, no da como para hacerle una dramática acusación de irresponsabilidad al gobierno ni nada por el estilo”.

Para Mujica, “actuaron con rutinarismo. Se ve que nadie pensó en el narcotráfico, no le dieron ni pelota al narcotráfico. Si hubieran pensado un poco… Rutinario significa algo que no se piensa, que se hace automáticamente, como se hace siempre, y creo que fue lo que pasó”.

El exmandatario insistió, como lo hizo también esta semana, con que lo mejor se puede hacer es pensar que fue un error sin intención, porque “no debemos cultivar hacia el exterior una imagen de un país donde el narcotráfico se pudo haber infiltrado en alguna medida medio cerca de la cúspide del Poder Ejecutivo. Prefiero verlo por el otro lado y supongo que el gobierno hará lo que tenga que hacer”.

Mujica enfatizó que el problema fue que el Estado no revisó lo suficiente: “Es de suyo que rutinariamente tengan el caudal de información, y controlar sin que nadie les pida nada. El deber del Estado es adelantarse a la jugada, porque eso favorece la velocidad de los trámites, los intereses del turismo y un montón de cosas, pero tiene el inconveniente de que se pueden colar, por eso el Estado tiene que controlar y ahí el Estado falló”.

El gobierno “no logra convencer” a los docentes

Entre otros temas de actualidad, el expresidente analizó el conflicto en la educación, que durante las últimas dos semanas se ha manifestado con ocupaciones, marchas y paros en contra de la reforma educativa que impulsa la Administración Nacional de Educación Pública (ANEP). Según opinó Mujica, “el primer problema que tiene el gobierno es que no logra convencer a los docentes y si no se logra convencer a quienes van a instrumentar la política, da la impresión de un ejército donde el general grita una cosa y la tropa hace lo que quiere, y no se puede arreglar a prepo”.

El exmandatario comentó que a su entender la mejor forma de instrumentar la reforma sería en acuerdo con los docentes: “Hay que convencer y para eso hay que gastar mucha pólvora en discutir con la gente y aprender”, algo que, aseguró, tuvo que hacer cuando intentó impulsar la primera versión de la Universidad Tecnológica.

“No creo que se pueda gobernar desde una oficina de la capital, ojalá que la sociedad tenga tiempo y se encuentre a sí misma”, resumió.

Gira con Orsi en duda

Semanas atrás se había anunciado que en los próximos meses Mujica se embarcaría en un recorrido por varios países de América Latina junto a su compañero del MPP, el intendente Yamandú Orsi. Sin embargo, este viernes dijo que la gira está en duda porque por un lado debe “consultarle a la rodilla”, en referencia a su estado de salud, y porque también está acompañando a su compañera, la senadora Lucía Topolansky que se encuentra en recuperación, luego de sufrir un accidente doméstico.