Este martes, por más de siete horas, el titular del Ministerio de Ganadería, Agricultura y Pesca (MGAP), el colorado Fernando Mattos, compareció ante la Comisión de Presupuesto integrada con Hacienda del Senado para tratar los temas relativos a su cartera incluidos en la Rendición de Cuentas. Hubo muchas idas y vueltas, sobre todo en dos asuntos que les hacen ruido a los jerarcas del MGAP, aunque hayan sido votados tal cual por el oficialismo cuando el proyecto pasó por la Cámara de Diputados.
Se trata del artículo 340, que le asigna a la Universidad de la República (Udelar) 120 millones de pesos para el Hospital de Clínicas, con el objetivo de financiar “un proyecto para el tratamiento del cáncer de próstata y la creación del Centro de Referencia de Medicina Materno-Fetal”. Mattos no está de acuerdo con esa propuesta porque para financiarla se reasignan 100 millones de pesos que originalmente se destinan al Instituto Nacional de Colonización (INC).
Además, el jerarca también se mostró en contra del artículo 420, que establece que el Banco República transferirá a Rentas Generales 0,1% del valor free on board (puesto a bordo) neto “de las exportaciones de animales bovinos y ovinos en pie”, cuyo destino será para ciencia, tecnología e innovación.
Al finalizar su comparecencia, Mattos dijo en rueda de prensa que la cartera propuso una alternativa a la propuesta de quitarles 0,1% a las exportaciones, que implica que “ese mismo porcentaje, de un monto que es significativo de la recaudación del INAC [Instituto Nacional de Carnes], se destine a ciencia y tecnología”, pero definido “dentro del propio sector”. Por lo tanto, no dejan el antecedente “de que parte de la recaudación vinculada a la exportación de un determinado producto se derive a Rentas Generales, lo que constituiría, en términos prácticos, una detracción”.
“Eso sería un muy mal antecedente, cuando tenemos una larga política de Estado que ha rechazado ese tipo de prácticas, sin perjuicio de que no cuestionamos los destinos para los cuales la Cámara de Diputados votó esta moción. Hay una especie de avance sobre las recaudaciones de la institucionalidad agropecuaria, y no es sólo el caso del INAC: también se evitó que se derivaran recursos del INIA [Instituto Nacional de Investigación Agropecuaria] en la Cámara de Diputados, de la misma manera que también se propone que parte de los recursos del INC se deriven a otros destinos. Entonces, entendemos que esto afecta recursos genuinos que genera la propia cadena y que financian los cometidos de estas instituciones que están vinculadas al MGAP”, sostuvo.
Sobre el INC, el jerarca dijo que “está claro que en esta administración no se están comprando tierras”, y es un tema “que se puede discutir”, ya que “se compró mucha tierra en el pasado”, y “evidentemente hoy los recursos recaudados, que salen del sector agropecuario, porque son impuestos y tributos que paga el agro, el gobierno decidió destinarlos a la financiación de la erradicación de los asentamientos en la Rendición de Cuentas de 2021”.
Subrayó que “había una cantidad de recursos que estaban allí y nadie puede discutir el destino”, porque es “uno de los grandes flagelos que tienen nuestra sociedad, una cantidad de uruguayos que viven en condiciones que son impropias”. Pero se posiciona en contra de “esta nueva propuesta” en la actual Rendición de Cuentas, “de afectar 100 millones de pesos adicionales de los fondos del INC”.
Además, Mattos subrayó que “nadie puede discutir la importancia de la dinámica agropecuaria” y resaltó que “hay sectores que están más golpeados”, como el granjero, “que no está atravesando un buen momento, y no es un sector que esté vinculado a la exportación”. Destacó que cuando se habla del sector agropecuario es “un espectro muy grande de rubros” y la mayor parte de ellos “se benefició de los precios internacionales”, mientras que, en el caso de la granja, “ha producido muy bien, pero ha deprimido los precios, porque no está vinculado a un mercado externo y depende de la demanda interna, que es compleja”.
“Por lo tanto, para eso tiene que estar el gobierno, las políticas activas, para tratar de neutralizar y dar soporte a sectores productivos estratégicos, como es la granja, que genera nada más y nada menos que las frutas, verduras y hortalizas que necesitamos para nuestra buena nutrición. Por tanto, es importante que existan políticas, para lo cual este año vamos a estar ejecutando más de 600 millones de pesos en ayudas al sector granjero”, subrayó.
Botana: “No creemos que sea bueno gravar exportaciones”
Dentro del oficialismo no sólo el MGAP está en contra de estas reasignaciones. El senador del Partido Nacional Sergio Botana, integrante de la comisión, dijo a la diaria que “hay que financiar” el objetivo del Hospital de Clínicas, “pero no de esos fondos del INC, y en eso hay coincidencia con el ministro”. En tanto, sobre el 0,1% que perjudica al INAC, señaló que “el antecedente de pasar un descuento a Rentas Generales termina siendo una detracción técnica, y ese no es el objetivo del gobierno”.
“Nuestra filosofía se opone a ese tipo de instrumentos. No creemos que sea bueno gravar exportaciones, por lo cual me parece bien que esos recursos queden en el INAC, que les dará destino de investigación a través de distintos organismos, como ya lo viene haciendo”, sostuvo. Por tanto, ese artículo también lo cambiarán y, “obviamente”, van a “buscar los recursos para la investigación científica en otra parte”.
Botana dijo que esta postura, contraria a esas dos reasignaciones, es la mayoritaria de su partido, ya que hasta ahora en la bancada de senadores nacionalista “nadie ha hecho algún comentario en sentido contrario”, por lo que falta ver qué harán al respecto los demás socios de la coalición.
Sánchez: en el sector agropecuario “tampoco son todos malla oro”
Por otro lado, el senador del Frente Amplio Alejandro Sánchez, integrante de la comisión, luego de la comparecencia de Mattos, señaló en rueda de prensa que en la oposición están “muy preocupados”, porque, “lamentablemente, se han visto muy afectadas las políticas diferenciales para la producción familiar, cuando, en realidad, todos sabemos que el sector agropecuario uruguayo está viviendo un huracán de cola en términos de precios y de producción”.
“Pero la realidad de los productores es que no todos son grandes ni todos se benefician de este viento de cola; entonces, las políticas orientadas hacia la producción familiar se han visto disminuidas. Se ha asistido a menos productores y continúan los recortes de instituciones que son muy importantes atenderlos, por ejemplo, el INC, que ha adquirido sólo 200 hectáreas”, sostuvo. Además, recordó que en la Rendición de Cuentas de 2021 hubo un fuerte debate, cuando se estableció que se le quitaban recursos al INC –para la erradicación de los asentamientos– y se dijo que el Ministerio de Economía y Finanzas iba a colocar recursos, “hasta 15 millones de dólares”, pero en realidad “fue cero”.
Además, resaltó que si bien el MGAP ha dicho que no lo comparte, lo votado en Diputados “le sigue sacando recursos” al INC y, de alguna manera, el FA siente que “aquellos organismos que están atendiendo a los pequeños productores cada vez tienen menos recursos para hacerlo”. En tanto, dijo que la situación de la granja es “muy preocupante”, porque los 20 millones de pesos que se agregan en la Rendición de Cuentas para el Fondo de Fomento de la Granja “ni siquiera cubren la pérdida del poder de compra” del fondo, en un momento en el que “los costos han crecido, por el aumento del combustible y los insumos”. “Entonces, estamos muy preocupados, porque el sector agroexportador anda muy bien, los grandotes no necesitan de apoyo del Estado, pero los pequeños se están quedando sin políticas públicas”, agregó.
Por último, Sánchez señaló que la teoría “del derrame, que a los grandes les va a ir bien y, por lo tanto, va a derramar algo para los más chicos, no ha sucedido en ninguna parte del mundo”. Entonces, cuando se habla del sector agropecuario, “tampoco son todos malla oro”. “Nosotros seguimos discrepando con la idea de que el derrame va a llegar. Porque hasta ahora lo que ha derramado ha sido más pobreza, menos salario, menos ingresos y dificultades para los productores más pequeños”, finalizó.