Ante el déficit de agua en los suelos, el Ministerio de Ganadería, Agricultura y Pesca (MGAP) y el Comité de Emergencia, que integran varios actores, decidieron extender la emergencia agropecuaria por tres meses más, hasta abril. El decreto original, de octubre, involucraba únicamente a los rubros ganadería, lechería, horticultura, fruticultura y agricultura, que tampoco han mejorado sus condiciones, y ahora se incluyó a los rubros avícola, apícola y forestal. Entre las principales medidas se incluyen los corrimientos de pagos de distintas facturas. Entre ellas, por ejemplo, los productores podrán pagar las facturas de UTE de enero, febrero y marzo en seis cuotas, a partir de julio.
Dirigentes del Frente Amplio (FA) han sostenido reiteradamente que las medidas anunciadas son “insuficientes”. Por ejemplo, el presidente de la fuerza política, Fernando Pereira, se preguntó en diálogo con Agesor si las autoridades “estaban de vacaciones” dado que era “necesario prevenir este tipo de problemas” porque “los reportes meteorológicos estaban disponibles desde hace meses”. Por este tema, el FA citó al ministro de Ganadería, Fernando Mattos, al Parlamento, para que dé explicaciones en régimen de comisión general.
El extitular del MGAP Enzo Benech dijo a la diaria que la situación es “complicada”, más allá de que el déficit hídrico sea normal en esta época, y con relación a las medidas valoró que “son todos parches”, entre ellas, el acceso a fuentes de crédito con microfinanzas. Para el exministro, es una herramienta que “ayuda”, sin embargo, consideró que es “totalmente insuficiente”. “Hay que ver cómo se instrumentan las nuevas medidas. Todas las medidas ayudan, pero el problema de fondo es cuando falta el agua y a su vez la comida”, insistió, y rememoró que en la anterior administración a los productores, en especial a los chicos, les repartieron cascarilla de soja concentrada para el ganado.
Benech apuntó que “está bueno” que el gobierno haga un “esfuerzo”, y agregó que cuando pasan estos “picos” las intendencias y algunos actores salen a limpiar tajamares, cosa que “está bien”, pero “si no tenés agua, aunque tengas el tajamar limpio no te ayuda en nada”, apuntó.
Las propuestas
Por su parte, el diputado del FA Nelson Larzábal, junto a su par Alfredo Fratti, ambos integrantes de la comisión de Ganadería, Agricultura y Pesca de la cámara baja, apuntaron en una carta que las medidas tomadas hasta el momento son “absolutamente insuficientes” y llamaron a que haya una mejor coordinación entre organismos.
En ese marco, propusieron a las autoridades “postergar los pagos de contribución rural hasta tres meses después de levantada la emergencia”, tomando en cuenta la capacidad económica de cada franja o sector de productores; a su vez, propusieron postergar los pagos al BPS de los cuatrimestrales de enero y mayo y refinanciarlos en cuotas a partir de 2024 y 2025, como también subsidiar a los tamberos por cada litro de leche enviado a planta con el apoyo del Fondo Agropecuario de Emergencia y hacer un tratamiento especial para las deudas contraídas por cultivos afectados por esta situación y por las emergencias agropecuarias anteriores.
En conversación con la diaria, Larzábal consideró que viendo el panorama se va a afectar “para el futuro” a casi todos los sectores del agro. “Hay una cantidad de alimentos que se están perdiendo por la sequía, que no se pueden seguir regando, o incluso sembrar. Algunos de ellos son de muy mala calidad lo que se recoge, todo eso se está viendo muy afectado y especialmente la economía del productor, en especial los productores familiares, que siempre son donde más pesa. No tienen reserva, espalda para hacer frente”, expresó, y sostuvo que no tienen muchas veces acceso al crédito.
Una de las razones para considerar que las medidas son insuficientes es que esta sequía ya había sido anunciada a mitad del año pasado por varios productores. Larzábal expresó que en esta temporada se iba a volver a repetir la sequía del año anterior, que estaba agravada de antes y que “no se había recuperado los niveles hídricos en los suelos en el período invernal y de otoño anterior”.
Por último, recordó el programa “Más agua para el desarrollo rural”, que a inicios del gobierno sufrió recortes. El frenteamplista recordó que eran más de 2.900 proyectos aprobados de los 3.400 que se habían presentado. Sólo se financiaron un poco más de 400 y de esos “se ejecutaron muy pocos”: “Hay más de 2.000 productores que hoy podrían estar en otras condiciones si esos proyectos hubieran sido financiados como estaba previsto”, dijo, y concluyó que “no hay una política de desarrollo rural” más allá de algunos planes pilotos con algunos productores.